Once upon a dream.

Capítulo siete.

Capítulo siete.

-¡Hey Char!- la pelirosa interrumpe mis pensamientos

-¡Hey Lals!- la imito haciendola reir.

-¿Qué planes tienes para hoy?

-Ninguno, en realidad pensaba ir directo a casa y dormir.

-¿Y que tal si mejor vamos a una fiesta?

-¿Mmmh?

-Una chica de mi clase de Historia dará una fiesta hoy en la noche, pero no quiero ir solita. - hace puchero.

-Puedes invitar a Bastiaan. - la miro subiendo y bajando las cejas insinuadoramente.

-¡No!- me golpea. -te estoy invitando a ti.- voltea los ojos.

-Mmmh pero yo quiero que vaya él con nosotros. - yo también hago puchero.

-Pues entonces invitalo tú. - refunfuña.

-Ah no, tú quieres que vaya, tú le dices.

-Entonces no voy.

-¡Charlie!

-Tú decisión.

Patalea y hace berrinche hasta que se calma y suspira.

-Esta bien. - Me mira mal.

-...-

Llegamos a la fiesta exactamente a las once de la noche. La casa ya esta esta llena de personas y aún asi siguen llegando más.

-Esto si que esta al cien- murmra Bastiaan viendo pasar chicas en minifalda- Alala, ¿por que no eres divertida como ellas?

-Disculpame por no ser una zorra, idiota.

-Bastiaan deja a mi pelirosa en paz.-

-Aunque admito que me gustan tus jeans. -

-Cerdo. -

-Busca pleitos. -

-Prototipo de niño rico sin cerebro. -

-Soy el mejor en mi clase de álgebra. -

-Idiota. -

- Me encanta tu pelo rosa.

-Eres horroroso.

-Te ves sexy enojada.

- ¡Enfermo!

-Admite que me amas.

- Primero muerta.

Y eso, señoras y señores es amor del bueno.

-...-

-Esto ya esta saliendo de control, Charlie, deberiamos irnos.- murmura Alala por encima de la música. Estamos sentados en la barra de la cocina, los tres con muy poco alcohol en nuestro cuerpo.

-¿Deberíamos llamar a la policía? - Bastiaan me mira dudoso, mientras un grupo de jovenes ebrios y seguramente bajo la influencia de alguna droga, comienzan a crear un caos, destrozando la casa y amenazando a varias chicas que tratan de huir.

-No creo que esos idiotas nos dejen salir. - concluyo analizando la situación.

-Malditasea tengo sueño, ustedes son hombres hagan algo.- Alala se queja recostandose en las piernas de Bastiaan.

-Ustedes dos quedense aquí, ire a revisar arriba a ver que nos puede servir.- ordeno y subo las escaleras.

Llego a un pasillo donde hay tres puertas del lado isquierdo. Voy revisando una por una, pero no encuentro nada que pueda ayudarnos. Decido pasar al baño, me encierro y me lavo la cara. ¿Cómo vamos a salir de aquí? Yo también estoy muy cansado.

Una pedazo de papel entra por debajo de la puerta y lo agarro con intriga.

"¿Necesitas ayuda?"

Es lo unico que dice. Siento la presencia de alguien del otro lado de la puerta, y estoy seguro que es quien envió la nota.

-¿Sabes alguna salida que no sea la principal? - pregunto pegado a la puerta.

Recibo otra nota en respuesta.
"Pueden salir por la cochera. En la cocina hay una puerta que da al jardin trasero, y a la derecha esta la puerta a la chochera."

-¿Vas a decirme tu nombre?- reviso la nota de nuevo.- Sé que eres una chica por tu caligrafía, pero me gustaria agradecerte.

No obtengo respuesta, mas que otra nota.

"A."

Alala en multimedia.
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