My Only Love ➵ JB [EN EDICION]

Capítulo 3

"Destino"

📍Los ángeles, ciudad de California.|

25 de junio de 2012, presente. 

Emily

El maldito sol apuntaba a mis ojos como si fuera lo mas jodido del mundo, solté un quejido al ver la cortina corrida, como nos olvidamos de cerrarlas, mire a mi costado, Liam no estaba a mi lado, pase mis dedos refregando mis ojos, mientras daba un bostezo.

—Liam— un silencio se escucho, ¿donde estaba?

Tome mi ropa, y me cambie, agarre mi celular, debajo de este se encontraba una nota. Fruncí el ceño y la tome.

"Buenos días nena

Salí a comprar unas cosas con Jacob

Te quiero, Liam..".

Deje la nota sobre la mesita, y mordí mis labios. Decidí por comenzar a arreglar la cama, mientras sacaba las almohadas y frazadas, mientras sacudía, comenzando a estirar, y volver a poner las almohadas. Para después poner mi mochila en los pies.

Unos golpes en la puerta llamaron mi atención, ya que estaba con mi celular.

—¿Si?— dije lo bastante alto para que se escuche.

No escucho nada en forma de respuesta, segundos después, la puerta se abrió, y me encontré con Liam junto con una sonrisa en sus labios. Llevaba una bandeja en sus mano, la dejó sobre la cama, se acerco de a poco a mi.

—Emi...— no deje que terminara, ya que había juntado mis labios con los suyos. Definitivamente no le había dado tiempo a nada —Me vas a dejar sin aire...— murmuró sobre mis labios.

—Lo siento— reí, para volver a besarlo, puse mis brazos alrededor de su cuello, sentí las suyas alrededor de mi cintura.

—Liam...—murmuró entre besos.

—¿Qué?— respondió.

—Te quiero— deje de besarlo, mientras lo miraba a los ojos, esos ojos que me hipnotizaban siempre.

—Yo también te quiero, pero mucho— beso mi cuello.

Jacob

—Seguirá dormida...—

Entre lentamente en la habitación tratando de hacer el mínimo ruido, mire hacia la cama, esta todavía dormía, deje la bandeja en el mueble, y me senté en la cama. Comencé a mirarla. prestando más atención a sus facciones, sus pestañas ni tan cortas ni tan largas, sus cejas, sobre estas se encontraba su ceño fruncido, miré sus labios, estos armaban un puchero tan tierno, al instante una sonrisa se creó en ellos, alse la mirada a sus ojos, estos se encontraban abiertos en mi dirección, mientras comenzaba a moverse, para luego sentarse sobre la cama, ya cerca de mi. Me acomode más cerca de ella.