Capítulo 15

3.9K 204 6
                                    

Terminé empacando las cosas de Ryan porque hasta sus manos se quemaron con el sol. El último día en la playa, mi amigo se quedó dormido, y ninguna parte de su cuerpo estaba bajo la sombra. Sin embargo, esa no es la peor parte: Alessandro puso su teléfono sobre el estómago de Ryan, y ahora tiene un rectángulo blanco encima de su ombligo. Mi hermano ahora le dice Teletubbie, lo que lo hace enfadar más. Es realmente cómico, pero por el bien de nuestra relación, decidí no reírme.

El tío Lorenzo nos llevó hasta el aeropuerto, y estando en el auto me iba despidiendo de aquel hermoso lugar, y le decía adiós hasta el próximo verano. El auto subía y bajaba, lo que me hacía marear un poco. El calor era intenso, y agradecía estar dentro del carro con aire acondicionado. Cerré mis ojos en cuanto entramos a la autopista, abandonando mis ojos del turquesa del agua que me rodeaba. La música del estéreo de mi tío me impide dormir. La música italiana del momento parecía fascinarle, y no podía quedarse callado, cantando todas las canciones. Mi tío Lorenzo es tan distinto de mi padre. Ambos son muy cariñosos y amigables, pero cuando uno los llega a conocer, no se parecen en nada.

"¿Qué te pareció Italia, Ryan?" Lo escuché preguntarle a mi amigo sentado junto a él.

"Fantástica" Respondió con mucha emoción en su voz. Sonreí ante su respuesta. Era más que obvio que había amado el viaje, pero por más que lo hubiese odiado, respondería lo mismo por cortesía.

"Alfie amo Italia ¿Sabes? Aun no entiendo por qué vive en Estados Unidos" Sé que mi tío cree que yo y mis hermanos dormimos, por eso habla de mi papá. Tanto Lorenzo como el resto de mis tíos, no son muy partidarios de la idea de mi padre viviendo en Norteamérica "Recuerdo cuando nos dijo que se mudaría porque se había enamorado" Lo escucho largar una fuerte carcajada. Giro mis ojos, aunque estuviesen cerrados "Eran finales de los 80 cuando conoce a la mamá de Zoe. Él tenía 22 y yo 26, y nos habían invitado a una fiesta en la playa. Nuestros hermanos ya se han casado o estaban con sus novias. Éramos sólo nosotros dos contra el mundo. No podía pedir algo mejor. En casa hay un chico americano de 18 o 19 años que lo separaron de su novia, y estaba enojado en casa todo el tiempo. Él era el hijo de un amigo de nuestro padre"

"¿Y en esa fiesta conoció a la señora Milano?" Preguntó mi amigo. No quería que mi tío estuviera hablando de cómo se conocieron mis padres, porque en su versión, mi papá fue un idiota por dejar todo por amor.

"Si, fuimos a la fiesta esa noche, nosotros solos porque el chico americano estaba enojado con todos, pero esa es otra historia" Mi tío se ríe, y por algún motivo incluso eso me enfada "La playa estaba llena de gente, pero solo nos importan las chicas. Alfie vio a Lisa y no le sacó los ojos, y no se los sacó por el resto del verano. Se pusieron de novios en secreto un día antes de que ella tenía que regresar. Un mes después, tomó un avión y nunca más regresó. Unos años después, vuelve con un bebé: Dante. Pero ya no era lo mismo, había perdido a mi hermano. Me cambió por América"

Decido ponerme auriculares. Ya había tenido suficiente con las palabras de mi tío y opacar su voz con música parecía la mejor opción. Una mezcla de David Bowie y Elton John entró en mí y no me abandonó hasta que llegamos al aeropuerto. El resto sucedió rápido. No demoramos en subirnos al avión y despegar.


En cuanto llegué al aeropuerto en Springfield, suspiré. Por fin estaba en casa, aunque aún tenía que conducir más de dos horas para llegar a Mount Vernon. Extrañaba a mis papás y a Dante. Caminé por un largo pasillo, arrastrando mi valija sobre el suelo blanco. Quería llegar a mi cama y dormir por diez años. Pero en tres días empiezas las clases, me recuerda mi cerebro. Había olvidado que estaba por comenzar septiembre. Nunca me molestó el instituto, pero no veo la hora de terminar e irme, sé que hay más allí afuera por conocer, no sólo el pequeño pueblo de Mount Vernon. Chicago me espera el año que viene, aunque desearía poder llevar a Ryan conmigo hasta allí. No sé qué me espera en otra ciudad, tal vez solo soy una niña con grandes ideas. Pero la realidad es que siento que mi pequeño pueblo ya me queda chico.

REBELOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz