Cuéntame al oído

Capítulo sesenta y tres + info

Ha pasado una semana desde que volví de Madrid. Hablo poco con Jesús, por WhatsApp y poco más, algo es algo. En sus audios se le nota triste y apagado, y que decir de las videollamadas... Solemos hacer dos por semana, los miércoles y los sábados aunque ya sólo hablamos los sábados. Jesús no tiene tiempo para nada, ha pasado sólo una semana y ya está agobiado. Suspiro y me muerdo el labio. Por fin. Llevo media hora en la tienda esperando a que se impriman todas nuestras fotos, las cojo y salgo de la tienda. Pienso colgarlas por todos lados.

Al llegar a casa no tardo en volver a encerrarme en mi habitación. Hoy por suerte es sábado, lo que significa que podré hablar con él. Lleno parte de la pared que está enfrente de mi escritorio con algunas fotos, las que más me gustan. Sonrío y suspiro, le echo tanto de menos...

Mi móvil comienza a sonar, Jesús me está llamando, que ganas tenía. Me acomodo el pelo y me miro en el espejo, relajo los hombros y trago saliva, allá voy.

-Nena-Susurra tumbándose y se restriega un ojo- Siento haber tardado tanto en llamarte, he estado muy liado y no podía llamarte, lo siento.

-No te preocupes-Me siento en la cama y sonríe.

-Estás muy guapa-Alza una ceja y me río - Te echo de menos.

-Y Yo-Me apoyo sobre mi mano y él bosteza-¿Has dormido?

-Que va-Frunzo el ceño y se ríe- Ahora iba a ello, por eso te he llamado ahora. ¿Qué tal vas con tu padre?

-Bueno-Me río y suspiro- Más o menos va asimilando que estoy contigo.

-¿No te habrá dicho nada no?-Frunce el ceño y niego- Ayer hablé con tu madre-Alzo una ceja y se ríe, no tenía ni idea- Me preguntó que como estaba y eso, es muy maja.

Sonríe y me saca la lengua. Aunque ya no hablemos tanto como antes lo poco que lo hacemos disfruto un montón.

-Si quieres luego hablamos, estás cansado. Duerme un poco anda-Asiente y sonríe.

-Está bien. Hasta luego nena-Me lanza un beso y sonrío.

Suspiro y me muerdo el labio, pobrecito. Que esté estudiando en el extranjero no mola nada, además de que tiene que recibir clases particulares de francés, está sacándose el carnet de conducir. Está madurando o eso hace creer, me encanta que esté así.

-Mia -mi madre entra en mi habitación y asiento- ¿Has llevado a Mario a la academia? -Asiento y se ríe- Vale, entonces luego iré yo a recogerle.

-De acuerdo. Oye, ¿Le dijiste a papá lo de Jesús?, ya sabes...-Niega y suspiro- Ya se lo diré yo.

-Como quieras-Besa mi mejilla y vuelve a salir-Pero date prisa.

Desde que Jesús se fue estoy tratando de convencer de que cuando venga se quede en casa, por mi madre no hay problema pero claro mi padre es mi padre... Me paso una mano por el pelo y me tumbo de nuevo en la cama, estoy harta de todo esto. Necesito estar a solas, un par de días, dos, tres, quizás cuatro. Sin ver a nadie y hablar con Jesús, centrarme en él y hacerle reír y sonreír aunque esté a miles de kilómetros de mí. Ahora que es mi novio me da menos vergüenza hablar de él delante de mi familia, tengo más confianza y se me nota. También he perdido un poco la vergüenza y lo mejor de todo, he aprendido otra vez a querer.

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Leer esto, importante:

A partir de este capítulo habrá un adelanto de tiempo es decir, de aquí al capítulo 69 habrá adelantos de un mes, explico.

-Un capítulo, un mes que adelanto el tiempo.

El próximo capítulo será el 64 y vendrá en primer mes, en el 65 el segundo y así sucesivamente hasta alcanzar los seis meses, osea capítulos que estará Jesús en Francia.

Si no me entendéis dejarlo en los comentarios y trataré de ser un poco más clara. Un beso😘❤