Corazón Solitario

Capítulo 29: Secuestro PARTE 1

Ya había pasado un buen rato, Carlos, Sussy y Malena se había retirado, Azul se quedó un rato conversando con Sarah y Diego sobre el bebé y la boda, hasta que Sarah decidió retirarse, estaba cansada, ahora estaban Diego y Azul en el estudio, sentados en el sofá, abrazados , había empezado a llover.

Azul: Mi amor, me encantó la sorpresa que me hiciste, gracias mi cielo, por ser como eres (dijo pasando la mano por su vientre al igual que Diego).

Diego: No tienes que agradecerme nada mi bonita, eso y más haría por ti (dijo dándole un beso en la cabeza).

Azul: DE dónde sacaste a todos esos niños, se veían tan hermosos y adorables.

Diego: Pues Carlos y yo estábamos en el pueblo vimos que había un espectáculo con esos niños, representan a un orfanato del pueblo vecino, hacen ese espectáculo para ayudar a recaudar fondos y comprar comida, utensilios, ropa y útiles para la escuela. Me dieron tanta ternura, me ofrecí a ayudar a las monjitas que los cuidan para remodelar un poco el orfanato y comprar comida y así ellos no tienen que hacer esos espectáculos.

Azul: Mi amor, eres un sol (dijo dándole un beso). Creo que di no deja de llover no me voy a poder ir a mi casa (dijo dándose cuenta de lo fuerte que estaba la lluvia).

Diego: Mejor, así te quedas a dormir conmigo, acurrucaditos (dijo dándole un beso en el cuello) y haciendo cositas.

Azul: No mi amor, me da pena con Sarah (dijo dejándose llevar por los besos y las caricias de Diego).

Diego: Sarah no dirá nada, anda, vas a hacer mi esposa y eres la madre de mi hijo, tengo ganas de estar contigo (dijo voleando la cabeza de Azul y besándola con pasión, con deseo, tenía tantas ganas de tenerla entre sus brazos).

Sin darse cuenta estaban en la habitación de Diego, se besaban con desesperación con deseo, con amor, tenían mucha necesidad de sentirse, de amarse. Diego empezó a bajar la cremallera del vestido de Azul, mientras besaba el cuello de ella, y esta le quitaba la camisa, dándole besos en el hombro. Diego le quitó el vestido, dejándola en bragas, pues no llevaba sujetado. Ella empezó a quitarle la correa y desabrochó el pantalón dejándolo caer. Diego la apretó más a el, sintiendo la fricción de los pezones de ella contra su pecho, lo que lo excitó más y ella pudo sentir la erección de el encima de su intimidad. 

La cargó y la depositó despacio en la cama, bajó a besar el cuello de ella y luego a sus senos, devorando y mordiendo cada uno de ellos, lo que provocó un gemido por parte de ella. Siguió bajando con su lengua por todo su cuerpo, besó su vientre llegando a sus bragas y quitándola. Empezó a besar las piernas de ella, hasta llegar a su intimidad, deleitándose con sus jugos y jugando con ella, Azul solo echaba la cabeza hacia atrás, dejándose llevar por la ola de placer que Diego le estaba provocando, Diego subió hasta su boca y la besó, y ella hizo un movimiento quedando encima de el y empezó a besar el pecho hasta bajar al bóxer y quitándoselo, empezó a besar la intimidad de el, provocando que el hiciera un fuerte gemido ronco y agarrando el cabello de ella, Diego no soportaba más, la haló hacia el haciendo que esta se sentara encima de el y se fue introduciendo lentamente en ella, se miraron a los ojos, y cuando ya estaba completamente dentro, ella echó la cabeza hacia atrás y empezó a moverse lentamente, mientras el se acostaba mirando el vaivén de los senos de ella por los movimientos que hacía, se sintió morir cuando ella aumentó el movimiento y apretó su interior, provocando que este hundiera la cabeza en la almohada para ahogar el grito ronco, la volteó quedando el encima, y empezó a moverse, disfrutando del cuerpo de ella, besando su boca, su cuello, sus senos, ella enredó sus piernas en la cadera de él y el las acarició, siguieron un rato con las embestidas sintiendo que llegaban los dos, ella apretó más y el sintió que se moría y se derramó dentro de ella, ahogando el grito en el cuello de ella, siguió moviéndose lentamente hasta que no pudo más y se dejó caer encima de ella.