La Chica de la Biblioteca

Obligado...

- ¿Qué es lo que quieres Zoey? -pregunto molesta.

- Oh, pero que humor. La verdad no entiendo que es lo que te ve... -dice rodando los ojos.

- ¿Qué y quién me ve qué? -pregunto con el ceño fruncido y algo confundida.

- Nada ni nadie -dice rodando los ojos- Vine para preguntarles si mañana irán al campamento.

Oh es cierto, el campamento es mañana. Había olvidado que hoy es martes, tendré que preparar mis cosas, mañana nos iremos en la tarde.

- Si. ¿Por qué? -pregunto enarcando una ceja.

- Oh ¿Acaso no podré estar a solas con Matt alguna vez? -pregunta mirando al cielo. ¿Apoco esta bruja cree en Dios?

- No sé por qué dices eso. Yo no estaré con ustedes, pueden hacer lo que les plazca -respondo- No me interesa.

Si claro, Emma.

Tu cállate, por supuesto que no me interesa.

Uy si, y yo soy Marilyn Monroe.

Somos la misma persona, estúpida.

Y así es como peleo con mi conciencia.

- Eso es genial, porque aunque hicieras algo, te ahogaría en el lago -dice mirando sus uñas.

Río secamente, si se llega a meter conmigo, acabará enterrada. Y no sólo porque yo lo haré, si no que Alex y Jess irán a ese campamento, no querrá meterse con ellos. Mis amigos odian a Zoey, inclusive más que yo.

Se preguntarán por que es mi odio hacia esta rubia mal teñida, bueno... Hace un año ella se metió con mi hermano, justo cuando Jess estaba enamorada de él, bueno, sigue enamorada de Logan. La cosa es que esta idiota, no se muy bien que fue lo que se enteró, pero activo su poder de perra, y se metió con mi hermano. Luego de eso comenzaron a salir un poco, y bueno, esa "relación" se fue disolviendo poco a poco.

En fin, Jess estuvo triste durante semanas, obviamente nada le levantaba el ánimo. Así que con Alex, nos escabullimos y entramos a la casa de la perra de Zoey, colocamos tintura de colores en su shampoo y escribimos en su pared dorada. A los dos día, llegó al colegio con un sombrero y gafas de sol, así que "sin querer" la empujé y todos vieron que llevaba el cabello de colores.

Todos comenzaron a decirle que sabían que se teñía. Que era una rubia bastante hueca como para no darse cuenta que la tintura de esta vez,era de colores y cosas así.

Jess se repuso y Alex y yo obviamente nos divertimos mucho haciendo esa pequeña broma, no era la mejor del mundo, pero sirvió para que Zoey haya quedado un poco humillada.

- ¿Acaso crees que te tengo miedo? -pregunto desafiante acercándome a ella.

- Deberías cariño -dice guiñándome un ojo.

- Oh claro, rubia mal teñida. Lo que tu digas -respondo con una sonrisa tan falsa como ella.

- ¿Cómo me...? -comenzó a preguntar enojada pero fue interrumpida por Matt.

- Hola -dice serio. Definitivamente algo le sucede.

- Matt, cariño -dice Zoey abrazándolo, frunzo el ceño- Emma me dijo rubia mal teñida.

Él me mira, eleva una ceja y dice- ¿Por qué eres así Emma? ¿Acaso no tienes modales?

¿Qué? Definitivamente iba a golpearlo.

- Por supuesto que si. ¿Pero acaso Zoey no tiene cerebro cómo para saber que no tiene que meterse conmigo?

- Ya déjala en paz, Emma. Zoey no te ha hecho nada -dice molesto.