Beautiful Demons.

Combinación Perfecta.

Charlie

  — Como sigas doblando los ojos se te van a quedar así. 

Resople — Es que no se como puede estar cerca de ella y que no se le rompan los tímpanos. —Nathe estaba a unas mesas hablando cómodamente con Stacy, mis puños se cerraron. 

  — Han estado así por dos meses, aunque nunca los he visto besarse. 

— ¿Nunca? ¿Segura?  

  — Tanto como me llamo Lisa. ¿Te gusta Nathe? 

— ¿Se nota mucho? 

— ¿Notarse que? — La voz de Tim llegó, beso a Lisa en la cabeza y se sentó con nosotras en la mesa de la cafetería. 

  — Nada — Dijimos lisa y yo al mismo tiempo. 

Tocaron el timbre para salir de clases definitivamente y me desperece un poco, ya tenía tres días de haber llegado a Ellensburg, me sentía tranquila, camine junto a Lisa y Tim hasta la salida, hoy me habia traido mama así que tenía que esperarla para que me llevara a casa, iba distraída mirando hacia abajo. 

  — Que chico, ¿quien sera? 

— No se, no me importa — Segui mirando hacia otro lado. 

— ¡Oye! — Protesto Tim — Tienes a tu novio de frente. 

— Lo se bebe, pero es un detalle hermoso el que trajo. — A lo lejos veía a Nathe y Stacy agarrados de mano, mi sangre hirvió y quite la mirada dirigiéndola al frente, para mi sorpresa un chico bastante conocido estaba apoyado en el capó del carro fumando un cigarrillo y con un ramo enorme en los brazos de girasoles, instantáneamente mi sonrisa se hizo enorme y rodee los ojos algo divertida. 

  — Lo siento chicos, vinieron por mi. — Bese a Lisa en la mejilla y despeine a Tim; Corri hasta donde estaba Andrew, sus hermosos ojos estaban cubiertos por unas gafas oscuras, traía una camiseta ajustada blanca y una camisa de cuadros azules por encima, un pantalón negro y vans. Cuando me acerque tiró el cigarrillo y me abrazo fuertemente, enrolle mis piernas en su cadera y me beso la mejilla. 

  — Te extrañe tanto — Susurre escondida en su cuello. 

— Estoy aquí, no tienes porque estar mas sola, ven, te llevaré a casa — me baje de el y me entregó el ramo de girasoles, subí al asiento del copiloto y nos dispusimos a viajar a casa. 

Prendí la radio  y shape of you de Ed sheeran sono, Andrew iba concentrado en la carretera. — ¿Donde te quedaras? 

  — Aun no lo se, estaba pensando que en un hotel.

— ¿No es muy complicado?

— Algo, pero es mientras me establezco definitivamente, es temporal. 

  — Quédate en casa — Solté de sopetón, Andrew me miró. 

— Como se te ocurre, es muy repentino. 

— Se que a mamá no le importara, ella te adora. 

— Ni siquiera me conoce. 

— Claro que si,  Becca le hablo de ti. 

  — ¿Ella hizo eso? — Me eché a reír. 

— Bueno ¡Duh! mi mamá era como su mama, obvio le contaba cosas. 

  — Al parecer no las suficientes. — apretó las manos en el volante, apoye mi cara en el vidrio y me dispuse a mirar lo de afuera, después de un rato en silencio  hablo —Lo siento Char, es solo que a veces me frustro y me pregunto qué hubiese pasado si ambas hubiesen hablado a tiempo. 

 Suspire — Las cosas hubiesen resultado lo mismo, eso fue una decisión de ella y muchas veces la odie por ser egoista, pero tambien la entendi y probablemente si no hubiese sido por ella yo también estuviese muerta. 

  — Y eso es lo que más me molesta. 

  — ¿Te molesta que esté viva? — Freno el carro en seco, me miró y me jalo a su regazo. 

— Jamás he dicho eso, eres  un tesoro valioso que no debe dudar de su vida, eres mi mejor amiga, mi hermana, mi conexión con ella, es como si la viera reflejada en ti. No quiero que desaparezcas, ni dudes de tu vida. — mis lagrimas salieron por primera vez sin culpa, ni remordimiento, me permití extrañarla de buena manera, Andrew me abrazo fuertemente, escondí mi cara en su pecho y el solo besaba mi cabeza. — Eres  mi persona favorita a proteger y cuidar. 

  — Cuando teníamos quince Becca conoció un chico y tuvo su primer corazón roto, el chico también tuvo su nariz rota. —Sorbí mi nariz. 

  — Dejame adivinar — alzó mi barbilla y seco mis lagrimas — Tu fuiste la que le dio esa nariz rota.  —Me reí un poco.

Me senté de nuevo en el puesto del copiloto  y le mostré por donde quedaba mi casa, cuando llegamos mama no estaba en casa, me dejó una nota en la nevera que la llamaron de turno urgente que la disculpara, resople y me tire en el mueble, Andrew observo todo. 

  — Se que no es lo que esperabas pero mama no acepta el dinero de papá aunque es todo suyo.

— Es perfecto — Se tiró en el mueble conmigo — ¿Guerra de agua?  

  — Suena genial . — Buscamos en los cajones de la cocina globos y Andrew sacó de su carro dos pistolas de agua. 

Nos fuimos al porche a llenar los globos y las pistolas, cuando ya estuvo todo preparado nos pusimos de espalda y contamos diez pasos, había puesto un pequeño minicomponente con música de Rihanna, al llegar a diez nos doblamos y empezamos a disparar y mojarnos. 

*****

  — ¿Estas bien? — dos horas de juego y ya estábamos exhaustos tirados en el jardín de mamá.  

  — Si — Tome aire — Somos una buena combinación ¿No crees? 

Se echó a reír — Yo diría que una perfecta.  ¿Qué encontraste cuando volviste? 

  — Lo que me temía, Nathe esta con una tipa super irritante. 

— Eso me suena a celos — Lo mire. 

— Aprendí que ponerme celosa de una fea es faltarme el respeto — Andrew soltó una carcajada.

— Mentirosa, mentirosa cara de oso. 

— Si, si estoy mintiendo y probablemente mis jeans se prendan en llamas y me queme el trasero. 

— ¡Valla! tu humor cambia en un milisegundo — Se paró y me ayudó a ponerme de pie,  me cargo por la espalda para llevarme dentro de la casa. 

  — ¡Exijo una compensación, quiero comida!  ¡Y más te vale que esté muy buena! — le grite mientras me reía al mismo tiempo. 

  — Si, si, como diga la señorita Adams.  

  — ¡Bájame Andrew! Voy a llamar a Rachel. 

Me apretó un poco más —   Tal vez hasta me ayude. — Me llevó hasta el piso de arriba y me encerró en el baño. — No salgas hasta que no estés limpia. 

Estupido Andrew — ¡Me debes una pizza! 

  — Si, si, como digas.