El Misterioso Sr. Laufeyson

capitulo 5: Historia. Profecía

—Te recomiendo que te pongas cómoda y que busques refrigerio si te sientes en la necesidad de alimentarte. Tu débil condición humana hará que me interrumpas y realmente perderé los estribos. ¿Está claro?

—Bien, cuentacuentos.

— ¿Qué? —Loki miró a Lisbeth de una forma graciosa.

—Un cuentacuentos, pues, como su nombre lo dice, cuenta historias a los niños —Loki seguía haciendo el mismo gesto — ¿Qué no…? —iba a decir "¿qué no tuviste infancia?" Pero se acordó del extraño mundo que rodeaba al Loki de niño en su sueño, así que se ahorró el comentario.

— ¿Que no qué? —preguntó alzando una ceja. Lisbeth suspiró.

—Olvídalo. Quédate aquí.

Al abrir la puerta, después de asegurarse de que no había ruido alguno en el pasillo, sintió muy cerca la presencia de Loki y le encaró.

— ¿No te dije que te quedaras?

—Cállate y camina antes de que me arrepiente revelarte mis planes. ¡Muévete!

Le dio un empujón y ella le golpeó la mano.

— ¿Esto será siempre? —preguntó Loki entre risas macabras.

—Cállate y camina —le imitó. Loki le sonrió pícaramente y ella puso los ojos en blanco mientras abría la puerta.

—No hagas ruido, ¿eh? —susurró Loki.

—Cállate y camina —repitió.

En ese momento, Lisbeth se tropezó con sus propios pies y Loki la sostuvo por el brazo. Ella gimió y se irguió.

—Lo vuelves a decir y te lanzo por las escaleras Lisbeth —dijo Loki al verle las intenciones.

Ella asintió y no dijo nada. En la cocina, sacó varias latas de refrescos y una bolsa de Cheetos, intentando no hacer demasiado ruido.

En la habitación, acomodó su almohada y sus cojines, se sentó, abrió una lata, el Cheetos y comenzó a comer.

—Puedes empezar. Desde el principio. Y te advierto que de seguro haré varias preguntas, ¿vale?

Loki suspiró y se acercó a la ventana.

— ¿Por qué no te sientas? —preguntó Lisbeth. Loki la fulminó con la mirada —. Si te fastidias de estar de pie, la oferta sigue estando disponible.

Loki asintió levemente y respiró hondo.

—Existen nueve reinos, que juntos se les llama Yggdrasil. El árbol de la vida. Lo conforman Vanaheim, el reino de los Vanir o de los dioses de la naturaleza y la fertilidad. Niflheim, el reino de las tinieblas y el terror. Helheim, el reino de los muertos. Muspelheim, el reino principal del fuego. Alfheim, el reino de los elfos de la luz. Svartálfaheim, el reino de los elfos oscuros. Midgard, que es la Tierra para ti. Jotünheim, el reino de los gigantes de hielo. Y Asgard, el reino de los dioses. Claro que yo supuse que no había otros mundos, pero sí, los hay. Por cierto, los reinos que te acabo de mencionar no están en orden.

Mañana no recordaré esos nombres… Pensó Lisbeth. Loki sonrió un poco.

— ¿De qué mundo provienes?

—Ehm… Yo toda mi vida creí que era un asgardiano, hijo de Odín Padre de Todo y Frigga; y hermano del magnánimo Thor. Pero no es así. Soy hijo de Laufey, rey de los gigantes de hielo. Jotünheim. Pero crecí desde que era apenas un bebé en Asgard.

—Es decir que eres… un príncipe. ¡Vaya! La persona de más alto rango que he conocido es el presidente de este país.

Loki alzó una ceja y Lisbeth hizo silencio.