Nueva vida

-Severus Snape-

-¿Qué sucede? ¿Dónde estoy?- pregunta el joven confundido y un poco asustado.

-¿Me creerías si te digo que no tengo idea?- le contesta su viejo mentor feliz.

-Obviamente me estás mintiendo- responde enojado por no querer contestarle.

-Severus... Severus, por favor, este no es lugar para enojarse- le dice usando el mismo tono de hace unos instantes, con una sonrisa en sus labios.

El pelinegro trató de relajarse, pero no era sencillo, y es que, al abrir los ojos, lo primero por lo que pasó fue un gran susto al ver de nuevo a su viejo amigo y mentor, pero ahora, comenzaba a enfadarse al ver que, de nueva cuenta, Albus no le diría lo que estaba ocurriendo.

-¿Por qué no damos una vuelta?-

A esto Severus mira por una ventana cercana y se percata del ambiente en el que está, pareciera que estuviera nevado afuera, el ambiente exterior se veía muy blanco a su gusto, sin embargo, no sentía frío ni nada similar, esto estaba muy raro.

-¿Vienes Severus?-

Escucha la voz de Dumbledore detrás de él y voltea asustado de ver a Albus ya en la puerta, esperándolo, ¿cómo se había movido tan rápido? Solo volteó uno segundo o dos segundos.

-Como quieras- dicho esto, fue junto a Dumbledore.

-¿Cómo es que estamos en Hogwarts?-

Albus no le responde y solo continua caminando, como si su amigo no hubiera dicho nada.

-¡Bien, si vas a continuar con tu misma actitud obtendré las respuestas por mí mismo!- le responde enojado de ver que lo trataba como en antaño, al terminar de decir esa frase se fue por un corredor distintos al de Albus.

Al cabo de unos momentos le pareció extraño que las cosas no cambiaran mucho a su alrededor.

-¿Qué te pareció el lugar?- escucha la voz de Albus de repente a su lado y lo mira asustado.

Esto no tenía sentido, se había alejado por un corredor del lado opuesto y no había ninguna puerta por que la que el viejo pudiera llegar hasta ahí sin tener que haberlo visto.

-¡Dime de una maldita vez en dónde estoy o...!- gritó enojado, palpando su pantalón y se sorprendió de no encontrar su varita consigo.

-Severus tranquilo- le dice poniendo una mano en su hombro en señal de apoyo y de cariño -solo... pedí que estuvieras aquí por un momento-

-¿Pediste? ¿A quién?-

Albus no responde, solo mira detrás de él por un momento, como si alguien o algo le susurrara algo importante, ya que el viejo asintió levemente.

-No tengo mucho tiempo, así que... te pido perdón Severus...- el joven frente a él lo miró extrañamente por ese comentario, al parecer eso era lo último que se le hubiera ocurrido que le dijera -por todo lo que te he hecho, desde que estudiaste en Hogwarts hasta el último momento en que te vi... en la torre... nunca te lo dije... pero... después de conocerte más a fondo, te convertiste en alguien muy especial para mí, como en... un hijo, al igual que para Minerva-

-¿Por qué me dices...?-

-Pronto comenzarás otra etapa muy diferente en tu vida, y créeme cuando te digo... si alejas a la señorita Granger por lo que te vaya a suceder, regresaré y te haré lo peor que se me pueda ocurrir, y ya sabes, tengo mucha imaginación- termina de decirle con un tono pícaro.

-¿Granger? Solo dime por qué...- y se asustó un poco más al ver a Albus comenzar a desvanecerse junto con el entorno -¿Albus?-

-Se feliz Severus-