Un Nuevo Comienzo (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 16 Soluciones.

---Nowaki—

Al llegar a la casa, mis hijos se encerraron en su habitación y mi Hiro-san, se quedó en la sala leyendo un libro.

-Hiro-san, quiero jugar.
-Pues juega. –respondió.
-Pero contigo.
-No empieces con tus perversiones.
-Hiro-san, -me senté a su lado- quiero hacerte mío otra vez.
-¿No te cansas? –se sonrojo.
-No.
-Pues yo sí, y ya no quiero caer en tus jueguitos.
-Uno más Hiro-san.
-No.
-Por favor.
-Que no.
-Te lo ruego.
-Nowaki ya cállate.
-No lo haré hasta que aceptes.
-Maldición, eres un pervertido.
-Es que quiero otro hijo contigo.
-Ah. –se sonrojo.
-Deberías de aceptar mamá. –rio Akane.

Ambos volteamos a ver y nuestra hija estaba en el comedor tomando un vaso con agua.

-¿Cómo es que...? –murmuro Hiro-san.
-Desde hace rato que los he estado escuchando.

Hiro-san se puso más rojo de lo que estaba y me dio un librazo en la cabeza.

-¿Por qué lo hiciste?
-Por tú culpa estás pervirtiendo a mi hija.
-No lo hago. –respondí.
-Y tú Akane, -la señalo mi Hiro-san- se me olvido darte esto.

Se levantó de su lugar y le entrego una bolsa.

-Kyaaaaaaaaaaaaaaaa, son todos los tomos de mi tío, y él nuevo que saldrá este mes.
-No entiendo cómo es que pervierten a mi niña. –suspiro.
-¿Quién Hiro-san?
-No te hagas el inocente, entre tú y Akihiko han pervertido a mi niña.
-¿Ah?
-Akane, recuérdame no pedirte consejos. –suspiro mi amado.
-¿Por qué no? ¿Acaso no fue buena la idea de vestirte de Maid?

Me sorprendí ante lo que dijo mi hija.

-¿Fue tu idea?
-Papá esto es...
-¿Lo fue? –la mire y mi amado se sonrojo.
-Así es. –susurro.

Me levante y me acerque a su lado.

-No te preocupes tu puedes leer todo el trabajo de Akihiko si gustas siempre y cuando me digas como sorprender a mi Hiro-san.
-No lo duces papá eso haré.
-Quiero sorprenderlo.
-Vi un manga donde el seme ataba al uke y lo vendaba.
-¿Enserio? –me sorprendí- suena interesante.
-Así es...
-Ey, de que hablan ustedes dos. –comento Hiro-san cruzado de brazos.
-De nada mami, solo le decía a mi padre algunas cosas de la escuela.
-Eso espero...

Ambos reímos y abrazamos a mi amado.

---John---

Me siento tan triste, tan desesperado.

Cuando escuche que Vlad se había ido, sentí mi corazón acelerarse, pregunte sin motivo alguno donde estaba pero Akihiko no me dijo nada, me siento ansioso, quiero tenerlo frente a mí y abrazarlo fuertemente...

Aunque otra parte de mí se resiste a esa idea, no puedo verlo, no quiero hacerlo, él se metió con otra persona, no le importo nuestra familia, simplemente nos destruyó.

Pero...

Lo amo, maldición, me estoy arrepintiendo de lo que hice, no debí pedirle el divorcio, aunque las fotos son verdaderas, su expresión de decepción, de tristeza sigue estando en mi mente.

Dijo que esperaba un hijo... Un hijo mío, pero no lo creí, lo mande a volar dejándolo sólo... y sí fuera mí, y si me decía la verdad...

Tome las fotos y las mire de nuevo...

Me duele...

Mis lágrimas comienzan a caer...

¿Cómo perdonar una infidelidad así?

¿Cómo creer que ese hijo que espera es mío?

Cuando estaba a punto de romperlas algo llamo mi atención. Había una pequeña fecha en la parte posterior de la foto.

-Imposible...

Esa fecha es exactamente el día de nuestro aniversario, pero...

Ese día estuvimos juntos, incluso yo le hice el amor...

Esto no es posible, tal vez se registró la fecha de impresión, debe ser eso...

A no ser...

Guarde las fotos y salí de mi departamento dirigiéndome a la agencia de detectives, tal vez ellos puedan sacarme de mi error.
Vlad, por favor que mis dudas sean verdaderas, que Vlad no me haya engañado, que esté equivocado al haberlo juzgado.

-Señor Miller.
-Tú. –gruñí.
-Tengo a hablar con usted.
-¿Qué quieres?
-Solo agradecerle.
-¿Cómo?
-Que gracias a usted Vlad y yo podremos ser felices con el hijo que esperamos.
-¿Qué?
-Eso mismo, Vlad espera un hijo mío.

Sentí un gran dolor en mi pecho y unas enormes ganas de matarlo, sin esperar más golpee fuertemente su mejilla.

-MIENTES.
-¿Por qué debería de hacerlo?
-¿Dónde está Vlad?
-Lejos de su alcance.
-Es mí...
-¿Su? –se carcajeo- Ustedes dos ya no son nada, ahora me casaré con él y cuidaremos a nuestro bebé.
-Serás...
-Así que John mejor busque a otra persona que lo ame, Vlad siempre me dijo que le daba asco acostarse contigo.
-No es verdad...
-Haya usted, -sonrió- cuidaré apropiadamente a mi Vlad.

Él se subió a un auto y se fue dejándome ahí con mi gran enojo. Me subí a mi auto y maneje hasta la agencia de detectives.

-¿Qué lo trae pro aquí? –pregunto el señor Takatsuki.
-Quiero que me digan si estas fotos son falsas. –le di las fotos.

Él se sorprendió al ver las fotos, pero luego cambio su expresión y llamo a sus asistentes dirigiéndose a una sala, me pidieron que me quedará en la recepción en lo que tenían los resultados, que no tardarían en lo absoluto.

Ese maldito de Misato dijo esas palabras con tanta seguridad...

Entonces es verdad...

Me engaño con ese estúpido profesor...

Y decía que no...

Sora los vio, pobre de mi hijo...

Aunque algo no concuerda...

Al principio Misato quería hablar conmigo para aclarar las cosas, y lo mande a volar...

Pero ahora me dice que eran amantes.

¿Qué debo creer?

¿Me engaño o es una mentira?

Amo a Vlad, lo amo con todo mi corazón, no puedo dejar de hacerlo, pero me siento tan confundido, tan triste, no sé qué debo hacer...

Le dije a Vlad cosas horribles, lo quiero a mi lado, pero no puedo...

-John. –me hablo el papá de Shinobu.
-¿Qué ocurre? –lo mire.
-Estas fotos son falsas.
-¿Cómo?
-Ven conmigo.

Lo seguí hasta una sala donde mostraron las fotos en una pantalla en grande.

-Es humillante.
-Lo más humillante, es que te tragues está mentira.
-¿Qué dices? –lo mire.
-Estás fotos están editadas, pudimos hacerle pruebas y la imagen de tu amado está sobreexpuesta.
-Eso quiere decir que...
-Alguien intentó engañarte, y por lo que veo lo consiguieron...

Tal vez fue ese Misato, trató de separarme de Vlad...

Entonces todo lo que hice y dije...

Soy un estúpido...

---Misaki---

Asco, desesperación...

Intentaba apartarlo como podía pero sus labios comenzaron a descender por mi cuello, su mano se metió en mi pantalón, no podía gritar, no podía quitarlo de encima...

Odio esto...

"Usagi-san por favor sálvame..."

-Hermoso, simplemente hermoso.

Sentí su asquerosa lengua pasar por mis pezones y sus dientes rozándome.

-Me gustaría escuchar tus gemidos.

Mis lágrimas no paraban de salir, no quiero esto, no lo quiero.

Él me quito el trapo de la boca y me beso, metiendo su lengua buscando con desesperación la mía, mordí fuertemente su lengua y se apartó.

-AYUDENME. –grite a todo pulmón.
-Maldita sea. –me tapo la boca.
-PAPÁ. –escuche la voz de Tadashi.
-Tss, -chasqueo la lengua- te salvaste esta vez pero te juro que serás mío.

Me mordió fuertemente mi cuello y luego se fue corriendo. Caí de rodillas al piso aun con mis manos atadas.

-Tadashi, -solloce- ¡¡¡¡¡¡TADASHI!!!!!
-Papá, -lo vi a lo lejos correr con Kotaro- papá.

Llego a mi lado y me abrazo.

-Yo sé por dónde se fue, -comento Kotaro- buscaré a ese idiota.
-Con cuidado.
-Tadashi, gracias. –solloce.
-Tranquilo papá, estas bien, estas a salvo, -me desamarro mis manos y me coloco su suéter encima- ya estoy aquí.
-No sé quién fue, -solloce- no lo vi, no lo reconozco.
-Shh, pronto vendrá mi papá.
-S-Sí Usagi-san se entera él...
-Él debe saberlo. –me miro- Esto no se quedará así, él que te hizo esto pagara.
-No te vayas. –lo abrace.
-Estaré contigo. –sentí como limpiaba mi cuello- Ese imbécil, lo mataré...
-Escapo. –gruñó Kotaro- Lo siento, no pude encontrarlo.
-No pasa nada. –dijo mi hijo- Vamos papá, debemos ir a la oficina para esperar a mi padre.
-Sí. –susurre.
-Te cuidaré, no permitiré que te hagan daño, ya lo veras. –sonrió mi niño.

---Vlad---

Takashima después de ayudarme a desempacar me ofreció llevarme a la plaza para comer un poco, comprar ropa más abrigadora y empezar a comprarle cosas a mi bebé.

-Takashima, ya te dije que no me mimes tanto, que me voy a acostumbrar. –suspire.
-Solo quiero que el pequeño este bien y a gusto.
-Sí claro, por tú culpa me pondré como pelota.
-Te verías muy lindo.
-Claro que no, -cruce los brazos- aún falta para que crezca un poco más.
-Lo sé, -acaricio mi vientre- veamos la ropa para comprarla de una vez.
-Pero aún falta...
-Más vale antes que después.

Fuimos a comer algo primero, después compre algo de ropa para mí, que él quería pagar pero no se lo permití, así que como venganza él compro toda la ropa para mi bebé, de colores neutros como blanco, amarillo, algunos vestidos por si era niña y trajes azules por si era niño.

-Takashima, es demasiada. –suspire.
-Quiero que no le falte nada a mi pequeño.

Me sonroje cuando dijo esas palabras.

-Vlad, eres alguien especial para mí, siempre te protegí antes y ahora no será la excepción, déjame recuperar el tiempo en el cual te deje solo.
-No tienes que hacerlo.
-Lo quiero hacer.
-Gracias.
-No agradezcas, -sonrió- ahora veamos la cuna.
-¿Ah?
-Podría ser una blanca o café. –se tomó su mentón- Aunque una rosa como de princesa o tal vez...
-Apenas tengo dos meses. –murmure.
-El tiempo pasa muy rápido, y cuando menos lo esperes, -acarició mi vientre- este pequeñín estará dando lata.
-Tienes razón.
-Lo vez, -tomo mi mano- vamos tenemos que ver los juguetes.
-TAKASHIMA.
-Es una broma...

Al menos puedo olvidar el dolor que siento...

John no sabes cuánto te amo y te amaré por siempre...