No Homo ❀ markhyuck

12.

-Eso está jodido.-Chan dijo, cuando Mark terminó de contarle toda la historia de lo que había pasado. Habían pasado cuatro días después de lo sucedido pero el castaño aún no se había enterado.

Chan era un amigo suyo de la secundaria pero se habían separado y sólo se hablaban por teléfono desde que empezaron a la universidad. A los padres de Mark nunca les cayó bien Chan pues al saber que el amigo de su hijo era bisexual lo juzgaron a pesar de que en ese momento tenía una novia. No lo mencionaban pero Mark conocía las miradas que le daban a su amigo cuando éste se quedaba a cenar. Incluso hubo días en los que Mark y él se quedaban cenando en su habitación cenando o si cenaban en el comedor era porque sus padres estaban en el trabajo.

-¿Puedo quedarme en tu casa?-Mark preguntó tratando de hablar lo más bajo que podía pero que su amigo lo entendiera, ya había empacado algunas cosas así el chico no le hubiese dado una respuesta.

-Claro, pero, ¿por qué?-Mark rodó los ojos, este a veces era bastante lento.

-Las cosas están tensas. Sé que Taeil le está diciendo cosas a Donghyuck. Y, no quiero ver a Irene ahora.

Chan no dijo nada pero Mark lo conocía tan bien que sabía que en ese lapso de silencio había asentido con la cabeza.

-¿Quieres venir ya? Podemos ordenar pizza y eso, como en los viejos tiempos.-los labios de Mark se alzaron un poco hacia arriba recordando los momentos que había compartido con Chan, se sentía bien recordar aquello porque fue la época más feliz que Mark pudo haber vivido. Creyó por un momento que había sido cuando salió con Irene, pero se dio cuenta de que no, que le bastaba salir con amigos y reír para pasarla bien. Tal vez, pensó, porque el Mark más joven era muy inseguro y no estaba conforme lo que tenía y Mark ahora quería viajar en el tiempo y abofetearse a sí mismo porque lo tenía todo, dos padres que lo querían (O algo así) y buenos amigos. Mark estaba demasiado cegado por la atención que quería como para notar todo a su alrededor. Era un chiquillo malcriado.

Suspiró.

-Sí.-aceptó finalmente.-Sólo déjame visitar a alguien primero.

Pudo ver a través del teléfono la manera en la que Chan le devolvía la mirada.

-¿Donghyuck?

-Sí.

(...)

Durante todo el camino hacia el departamento de Jeno se la pasó ideando qué rayos diría cuando viera a Donghyuck, y creyó estar listo. Hasta que llegó a la puerta del departamento y todo el plan que tenía en la cabeza se esfumó por completo. El ver a Jeno ayudó un poco, el chico poseía ése aura que resaltaba a donde quiera que fuera y el eye smile también ayudaba.

-Creo que no debería dejarte pasar.-habló, cruzado de brazos sin embargo el chico no parecía querer cumplir su argumento porque luego le sonrió con ternura y se hizo a un lado.-Pero bueno, no me meto en los problemas de otros.

Mark dejó salir todo el aire que estaba conteniendo y suspiró de alivio.

-Buena suerte.-fue lo último que escuchó de Jeno antes de que este desapareciera por el pasillo, se quedó mirando el interior de la sala vacía sin saber bien qué hacer.

Cerró la puerta con cuidado detrás de sí. ¿Qué debía hacer ahora? Tal vez no había pensado bien aquella estrategia, porque ahora estaba en el departamento sin tener que haber peleado o gritado, todo estaba demasiado calmado y ni siquiera había rastro de Donghyuck además de una que creía era su chaqueta colgada en el perchero junto a la de Jeno.

-Ahora entras a casas ajenas.-no pareció ser una pregunta ni mucho menos una acusación pues Donghyuck mantenía un tono neutral que hacía que fuese difícil para Mark saber cómo se sentía o qué estaba pensando. Bueno, la mayoría del tiempo era difícil para Mark descifrar a Donghyuck.