Los Ojos de la Luna Brillan

24 6 0
                                    

Aún estaba dormido en el piso, siempre soñaba con completa oscuridad, pero está vez al fin era algo diferente o al menos parecía serlo al ver una luz blanca detrás de él. Tal vez eso significaba algo, por esta vez podría tener un hermoso sueño, solo debía cruzar toda esa pesada oscuridad.

Entre más se acercaba la luz se convertirá más  molesta por ende le costaba abrir los ojos, ya dentro de ella comenzaba a visualizar algo al otro lado.


Se podía ver a es pequeña familia. Discutía como siempre, el joven estaba ahí "escuchando" a sus padres; parecía un día cualquiera, así que se acercó y se sentó en el sofá, Borja estaba a un lado, pero cuando intento agarrarlo de esfumó. Raro, pero era un sueño normal  después de tanto tiempo. Sonrío, justo cuando iba a prender el televisor para pasar la tarde con sus "padres" sonó su teléfono, lo saco y era un mensaje de Fer.

”¿Quieres venir a cenar?”

“¿Es tapioca?”

“jajaja
No, no lo es, mi madre comprara pizza y para nosotros dos es mucha.
Y la tapioca no es tan mala”

“Llego en 30”

“Ok, te espero~ ❤️”

Se levanto al guardar el celular en su bolsillo y fue a su habitación para arreglar su mochila e irse.

En lo que guardaba ropa y sacaba cosas, su mirada se desvío a su cama ¿Enserio era un sueño? Bajo la mochila y limpio un poco para acostarse, respiro hondo y cerró los ojos.

¿Realmente esto era así?
Se sentía tan extraño, era como si el mismo sueño tratará de decirle algo, sentía como su cuerpo se levantaba sin que el lo deseará, no lo controlaba hasta que abrió los ojos.

Ya era de noche. Miro a todos lados confundido al ya no estar en su habitación, se encontraba acostado en un sofá, en una casa que ni siquiera conocía.

-¿Estas seguro? -le dijo alguien a lo lejos, era una voz femenina provenía de un rincón de la habitación, pero donde ella estaba no había la luz suficiente como distinguir su rostro- ¿Luahn? -y por lo visto parecía que lo conocía- ¿No quieres venir a dormir conmigo? -Insistió-.

—Si, estoy muy seguro de no querer dormir contigo.

Quería saber cómo era su rostro, pero le aterraba el hecho de que no fuera una chica, sino él.

-Ay, por favor, Lu, no pasará nada malo, solo dormir, nada más… -La miro confundido-.

—¡Ni siquiera te conozco! ¿Tus padres no te han dicho que no metas a desconocidos a tu casa? -intento liberarse de la sábana que tenía encima de las piernas, pero parecía que estaba pegada a él- Esto es muy raro. ¿Le hiciste algo a esta sábana? ¿Por qué no puedo quitármela?

La chica suspiro y siguió hablando como si nada

-Bien… Ah, si tienes hambre ahí esta la nevera, ya sabes, en la cocina -rio levemente- y el baño esta al fondo a la derecha, descansa! -Y se desvaneció en la oscuridad-.

—¿Descansa?

Al ya no estar prosiguió a continuar su pelea con aquel trozo de tela.

"El pequeño Lu"Where stories live. Discover now