Deseo

Capítulo 7.

Min Ho no estaba seguro de que la vida de Min Woo era tener vacaciones de su vida porque también tenía que trabajar, y no porque no tuviera dinero, sino porque no quería levantar sospechas con Taemin si él no se dedicaba a trabajar, y creía que ya habían tenido las discusiones suficientes como para desear más, porque eso sólo hacía que quisiera volver a su vida normal por mucho que quisiera estar al lado de Taemin, porque una cosa era conocerlo por fotografías y la información que le dieron sus detectives cuando quiso encontrar a su hermano y otra el tener que vivir con él, porque tal vez no era tan diferente pero la personalidad del abogado era algo que nunca pudo ser dicha por un detective y lo tuvo que averiguar por él mismo, aunque ahora que las cosas parecían estar bien era fácil de convivir.

Abrió la puerta del apartamento encontrándose con la luz encendida que era el aviso de que Taemin ya estaba ahí y su mirada se paseó rápido por la sala de estar viendo también la luz de la cocina encendida que para él fue como si le dijera en dónde se encontraba el abogado. Colgó las llaves y se acercó hacia la puerta de la cocina para ver a Taemin de espaldas a él concentrado picando algo a lo que no le dio importancia, sino que sus pasos se volvieron lentos al momento de acercarse sin querer llamar la atención de "su esposo", escuchándolo reír cuando pasó un brazo alrededor de su cintura y dejó un beso en su mejilla, sintiendo como Taemin parecía buscar más de ese contacto al mismo tiempo que dejaba de picar las verduras que acompañarían a la carne que estaba preparando para la cena.

Colocó una mano en la encimera y su otro brazo estuvo alrededor de la cintura de Taemin para mantener distancia y la ropa del abogado no fuera a mancharse cuando éste se giró besándolo en los labios, susurrando un "buenas noches" que fue acompañado de una sonrisa, antes de continuar con un beso un poco más profundo que el primero, pero que no resultaba ser extraño cuando parecían haber arreglado las cosas entre ellos, porque Taemin había dejado de pensar que su esposo hacía aquello para compensar una infidelidad, y más si parecía que el cambio de su esposo era algo permanente, no sólo momentáneo, porque era normal los besos de buenos días, o antes de que uno de los dos saliera a su trabajo, al igual que al volver y antes de dormir, también se empezaron a volver comunes las caricias sin lujuria y las conversaciones acerca de cómo estuvo su día o con respecto a temas triviales, sin embargo no habían vuelto a intimar a parte de aquella noche en la que Min Ho le dijo que el sexo no era todo cuando él tenía otras formas de demostrarle que lo amaba pero aquello parecía ya no ser un problema.

—Hola —susurró cuando se separaron, volviendo a unir sus labios en un beso casto.

—Hola —Taemin sonrió —te escuché llegar.

Aquella frase le hizo sonreír a Min Ho y alejarse de Taemin para que continuara con lo que hacía antes de que él llegara, y se apoyó ligeramente en encimera, notando como el saco del abogado estaba colgando en el espaldar de una silla, lo que para él significaba que no había llegado hace mucho porque poco a poco se estaba acostumbrando a las costumbres de Taemin y cuando llegaba más tarde de lo que era común podía entrar en la cocina sin siquiera haberse cambiado de ropa para no manchar la con algo que fuera difícil de quitar, cuando las peleas no existían era fácil adaptarse y más si Min Ho estaba conociendo a Taemin, aunque éste también lo estaba haciendo porque él y Min Woo no eran iguales, de hecho, para Min Ho, eran polos opuestos.

—Me imagino, no avisé mi llegada pero tampoco fui tan silenciosos —el abogado asintió — ¿necesitas ayuda?

—No, ve a descansar si quieres.

Min Ho asintió sin insistir para luego dirigirse a la habitación que compartía con Taemin para tomar su ropa porque iría a bañarse, y luego descansaría un poco tal vez, porque trabajar en el restaurante de Jong Dae era más cansado que su trabajo habitual, pero al menos al día siguiente tendría su día libre, a pesar de que fue difícil de convencerlo a Jong Dae de que su día libre fuera en un fin de semana porque parecía ser los momentos en los que más personas iban al restaurante, sin embargo había logrado convencerlo diciendo que su día libre no sería uno por cada semana, sino un día cada quince días, que del que Jong Dae dudó pero parecía que el nombre de Taemin tenía el suficiente peso porque cuando dijo que era porque quería compartir tiempo con su esposo que no trabajaba los fines de semana fue suficiente para que aceptara.