Capítulo 11.

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No se sentía nada cómodo teniendo que viajar en un autobús, pero lo hacía por Taemin que parecía emocionado de poder tenerlo a él y a su madre en el mismo lugar, aunque le había advertido de manera sutil que debía intentar llevarse bien con su madre y hermana; y Min Ho no necesitó que le explicara la razón de que le dijera eso porque sabía que todo se debía a su hermano, y él había dado su promesa de que intentaría que las cosas fueran bien porque así era pero no sabía cuán mala fuera la relación que Min Woo tenía con la mamá de Taemin porque imaginaba eso si el abogado se lo había advertido.

Observó a su alrededor todavía un poco incómodo y en momentos su mirada se dirigía a Taemin que a diferencia de él se veía demasiado cómodo mientras miraba por la ventana y en ocasiones lo vio sonreír, comentándole sobre algunas casa o pueblos que habían pasado, escuchando atentamente de las veces que quiso ir a uno de esos pueblos pero su hermano se había negado y quizás él debería hacer lo mismo que su gemelo, decirle que no, sin embargo con él era diferente porque quería complacerlo en todo y ya había dado su promesa de que irían a esos pueblos juntos, cuando tuvieran algo más de tiempo porque ahora Jong Dae no iba a permitirle salir del trabajo por un buen tiempo si habían conseguido le diera una semana para que no tuviera que regresar de inmediato del pueblo en el que vivía la mamá de Taemin, aunque el abogado le aseguró que no estarían mucho tiempo ahí, quizás por la mala relación que suponía Min Woo tenía con la mamá del abogado.

El grito y luego la risa de un niño llamó su atención, dirigiendo su mirada en esa dirección, viendo como un niño de tal vez un año de cerca de un año medio que jugaba con su papá, mientras los dos reían y por un momento aquella imagen le hizo olvidarse de lo incómodo que se sentía debido a que él no acostumbraba a viajar en autobús, y había tenido que soportar desde canciones que no le gustaban o jamás había escuchado hasta conversaciones demasiado altas sobre temas que no eran de su interés, además de que sentía dolor en la espalda, por tener que estar sentado ya cuatro horas sin poder levantarse y estirar su cuerpo y sabía que todavía le quedaban tres horas más según lo que le dijo el abogado, lo que parecía un método de tortura cuando él acostumbraba a viajar en avión o en su auto, pero hubiese sido muy extraño que llegara con un auto cuando Taemin y su hermano no tenían esas comodidades, y ahora tenía que estar ahí.

Una mano posándose sobre la suya llamó su atención para encontrarse con la mirada de Taemin y una pequeña sonrisa en sus labios, mientras recargaba su cabeza en el hombro de Min Ho, viendo en la misma dirección en la que antes veía "su esposo" sonriendo más amplio al darse cuenta lo que había llamado su atención, y no podía sentirse más feliz porque ahora sabía que su esposo sí quería a su hijo, que lo amaba de la misma manera que Taemin lo hacía porque aquella idea de no querer hijos había desaparecido.

—¿Estás bien? —inquirió Min Ho.

Se centró toda su atención en Taemin, porque creía que si para él era difícil soportar siete horas de viaje para el abogado debía ser peor y más en su estado, porque su vientre de tres meses y medio podía ser todavía pequeño para lo que suponían crecería, pero eso ya hacía la diferencia, como que Min Ho se preocupara mucho por el aunque no quería demostrárselo en exceso.

—Sí —Taemin acarició su pequeño vientre —estamos bien.

—¿Quieres dormir un poco hasta que lleguemos?

—No, estoy bien, tú pareces necesitar dormir un poco —Taemin le acarició la mejilla —te hará el viaje más corto.

—Estoy bi...

—Sé cómo odias estos viajes, el ambiente —susurró —pero te agradezco que quisieras venir conmigo.

—No iba a dejarte venir solo.

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