-Paper Hearts-

Broken.

Este capítulo será un poco distinto a lo que escribiría normalmente he estado fuera principalmente de varias redes sociales por un periodo muy largo de tiempo. Disculpen por dejar esto a la deriva pero, me parecía que no era lo correcto estar en ellas cuando hay y hubo cosas de mayor importancia en las cuales no me permitia acceder u actualizar capítulo.  

Mi país está en una situación muy delicada y destructiva y la verdad duele y da arrechera -como diría uno- ver como unos sinvergüenzas que están por el gobierno robando, matando sin piedad al pueblo...a nuestros hermanos venezolanos, saben que es despertarse y ver en las noticias como murió un niño/a porque no se consiguen medicamentos? o el hecho de que a los jóvenes que en estos momentos tienen el protagonismo por luchar para una venezuela libre los matan como si fueran cualquier cosa? y de maneras grotescas si puedo decir.

Me da rabia no poder salir a luchar pero si puedo contribuir donando a los heridos y de mas asi aporta cada uno su granito de arena..a continuación dejare una pequeña parte de una carta para venezuela... 

"Ésta carta a Venezuela y a todos los venezolanos no la escribe un burgués, un lacayo o un "fascista"; éstas líneas las escribe un venezolano de 18 años, un estudiante, un hijo, un hermano, un amigo, un apasionado por esta patria que tanto sufre, soy yo, un chamo más que se levanta temprano para ir a la universidad, un chamo que quiere ver a su país unido, sin más odio ni violencia, porque de nada beneficia al pueblo; solamente perpetua por la fuerza a un grupo de pillos que te manipulan y claman que votes por ellos cuando utilizan los recursos del estado y más, con tal de que le des un "chance" y ellos sigan llenando sus bolsillos.

Mientras escribo, recuerdo aquella hermosa canción del Tío Simón que dice "Si mi querencia es el monte y mi fuerza un cimarrón, ¿Cómo no quieres que cante como canta un corazón?", quiero que nuestros corazones canten "Venezuela"; quiero que nuestros miedos y temores desaparezcan porque no podemos seguir siendo sumisos ante el poder, que no es eterno si nosotros le damos un alto.

Basta ya, Venezuela, a que te sigan desangrando, que tus hijos se vayan al exilio, los maten en las calles por un reloj o la califiquen de "apátrida" por pensar diferente. Basta ya, Venezuela; no podemos seguir siendo nosotros, la tierra de tantos libertadores, los que hoy nos encontremos subyugados; basta ya que desde la Presidencia de la república se decida quién es "venezolano" y quién no. "

Venezuela tendrá un cambio y serás libre.  

                                                                                                                                                                -A.