18. Yendo de paseo

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Mia

― ¡Regresa a tu asiento! ―gritó Bobby, el entrenador, luego de hacer sonar su silbato.

Fue eso lo que hizo que despertara.

Había pasado una hora desde que el autobús arrancó hacia una estúpida convención a la que Bobby nos estaba obligando a asistir. Bueno, en realidad no era una obligación venir, solo lo hicimos porque Scott nos pidió a Stiles y a mi asistir, dijo algo sobre que es mejor que todos estemos juntos.

Isaac y Boyd estaban en el bus, pero unos asientos más adelante. Ethan, uno de los gemelos también estaba aquí. Allison y Lydia no, pero tampoco estaban lejos. De hecho, ellas estaban siguiéndonos en el auto de Allison. Debí haber venido con ellas. Estar en este bus me incomodaba, más aún aquí en el asiento trasero.

Estaba en el asiento contiguo al de Stiles y Scott, les había dicho que prefería sentarme sola, Stiles quería venir conmigo, pero me negué. Además, Scott parecía estar aún muy afectado por lo de Derek y él necesitaba de su mejor amigo.

Yo aún no podía creer lo de Derek, pero creo que lo sobrellevaba un poco mejor que Scott.

Miré por la ventana, parecía que iba a llover, aunque nunca se sabe con el clima, un segundo llueve, un segundo sale el sol.

Sentí que el asiento se hundió, giré y me encontré con los ojos almendrados de Stiles.

―Despertaste ―me dijo.

Asentí. ―Bobby me despertó.

― ¿Estás bien? ―me preguntó.

―Sí, o sea, solo estoy un poco cansada ―prácticamente no había dormido nada luego de lo que pasó en ese maldito centro comercial abandonado.

Stiles suspiró. ―Aún no puedo creer que no me hayas dicho que ibas a enfrentar a los Alfas ―él sonaba molesto y triste a la vez.

―Ya te dije que yo no sabía que Allison me estaba llevando ahí.

―De todas formas, pudiste rehusarte.

Suspiré. ―Stiles, ya hablamos de esto, ¿puedes no volver a sacar el tema?

Desde que me encontré con Stiles esta mañana en la escuela, me reprochó todo lo que había sucedido, estaba molesto porque no le había contado y estaba aún más molesto porque no quería que me pasara nada. Pero ya habíamos hablado del tema y no quería hacerlo más.

Él cogió mi mano y entrelazó nuestros dedos. ―Sí, lo siento.

Me recosté en su hombro y nos quedamos así por unos minutos.

―Deberías de regresar con Scott, ―le dije― ¿no estaban estudiando para los exámenes?

Stiles asintió. ― ¿Ven con nosotros?

Me reí. ― ¿Y dónde me voy a sentar? Ahí solo caben dos personas.

Lo malo del bus era que en cada asiento solo entraban dos personas y eso no era bueno para nosotros, me gustaría sentarme con ellos, pero no quería incomodar a Scott, él parecía estar mal. Stiles, por otro lado, quería estar conmigo, pero tampoco quería que dejara a Scott solo.

―Puedes sentarte en mi regazo.

Le sonreí. ― ¿Todo el viaje?

Era obvio que él no iba a poder cargarme todo el viaje.

― ¡Por supuesto que sí! ―respondió él emocionado.

―Tal vez si se arriman, pueda entrar, al menos un poco.

Siare | EMPE #3 | Stiles StilinskiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora