Capítulo 7 (Parte 2/3)

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"To live is the rarest thing in the world. Most people exist, that is all"
⇝Oscar Wilde.

Traducción: "Vivir es lo más raro del mundo. La mayoría de las personas existen, eso es todo"
⇝Oscar Wilde.

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Parte 2/3

La situación en la cual me encontraba en estos precisos instantes la podía describir de la siguiente manera: eran las 12:32 a.m, tenía cinco llamadas perdidas de Thomas en el celular y mucho alcohol en el organismo. Y no, no estoy ebria.

Necesitaba fumar un cigarrillo así que me dirigí al patio de la casa. Ahí me encontré con unas cuantas personas que estaban devolviendo todo lo que habían ingerido aquella noche, otros cuantos estaban tendidos en el suelo, inconscientes a causa de tanto alcohol y por supuesto, no podían faltar las parejas llenas de hormonas demostrando su "afecto" de manera pública. Finalmente puede encontrar un lugar algo apartado de la fiesta, suspiré y saqué del bolsillo de mi jean un cigarrillo y el encendedor.

Le di una calada al cigarro y observé como este se consumía entre mis dedos a la vez que expulsaba el humo lentamente por la boca.

-Creo que las chicas lindas no deberían fumar- escuché que decía una voz masculina a mis espaldas.

Al voltearme en dirección al lugar de donde proviene la voz, me encontré a un chico de ojos azules, su azul es distinto a los de Thomas, éste es más claro y es casi como si pudieras ver a través de ellos. Tiene cabello cobrizo, piel aceitunada y una escasa barba de pocos días se forma alrededor de una sonrisa ladina, de esas arrogantes y cargadas de prepotencia, adornando su rostro. El chico es alto, me saca un poco más de una cabeza de altura y debe estar en sus tempranos 19 años. Y a juzgar por su cuerpo, puedes decir que el chico se ejercita.

Ah y, ¿olvidé mencionar que está ebrio?.

Sí, éste chico definitivamente está ebrio.

Podías oler el alcohol que emanaba de sus poros a varios kilómetros de distancia, arrastraba las palabras y su caminar era algo torpe, descuidado y sin un poco de equilibrio.

-Y yo creo que los hombres no deberían ser unos idiotas pero, ¿quién los detiene de eso?- respondí, al tiempo que le daba otra calada al cigarrillo.

Su cara de asombro a causa de mi respuesta duró solo unos segundos y en su lugar, apareció de nuevo esa sonrisa.

-Yo lo único que intento es salvar la vida de una bella chica.

Al desviar la mirada por unos minutos de sus azules ojos, me percaté del hecho de que a unos pocos metros de nosotros había un grupo de chicos que observaban muy atentos a nuestra conversación y observé como estos hacían señas al chico parado frente a mí, indicándole que todo iba bien en la conversación. Una risa sarcástica brotó de mis labios y posé de nuevo la mirada en el rubio.

-Vaya... Así que te parezco linda...-susurré- Dime, ¿a caso esa es tu mejor línea, Romeo?.-hice una pausa- Tengo curiosidad por saber a cuantas chicas les has dicho lo mismo y cuantas veces te ha resultado el truco.- finalicé, dándole otra calada al cigarrillo.

Estaba en clara evidencia que éste chico de aquí era un niño mimado. Lo delataba su forma de vestir ya que son puras prendas costosas. Se puede decir que es uno de esos niños que despilfarra el dinero de sus padres como si no hubiera mañana. Además, tiene unos aires de superioridad que muestran que es alguien acostumbrado a siempre conseguir lo que quiere.

Before Us | MTC Libro #1 | [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now