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Eran las una de la tarde y nos encontrábamos en los camerinos de Justin, almorzando. Estábamos en el establecimiento desde temprano, Justin tuvo pruebas de vestuario, ensayo de las coreografías, prácticas de vocalización y entre otras muchas cosas que debía tener en cuenta a la hora de salir al show. Aria y yo lo acompañamos, como siempre, estábamos acostumbradas a este mover que se hacía cada dos años.

Termine de comer y junte mi plato junto al de Justin que se había ido a dar un masaje para estar lucido a la noche, Aria estaba con el celular acostada en la cama, camine hacia el cesto y tire las bandejitas desechables.

Mire a mi pequeña hija con el ceño levemente fruncido, pose ambas manos en la cintura.


— ¿Piensas quedarte echada toda la tarde hasta que sea la hora de prepararnos? —pregunte molesta, Aria volcó los ojos con pesadez.

—Estoy ocupada, mamá.

—A ver, ¿en qué? —Pregunte, camine hacia ella y estire la mano—. Enséñame el teléfono.

—No seas molesta—gruño alejando el teléfono de mi agarre, eso fue como un golpe en mi corazón de madre.

— ¿Cómo me dijiste? —pregunte alterada—. ¿Cómo te atreves a contestarme de esa manera? Como si fueses una adolescencia. Aria, tienes cinco años, debes obedecer a tu madre si es que no quieres que te castigue o te de un sermón.

—Está bien, disculpa—se sentó en el sofá para después pararse y pasar caminando por mi lado, restándole importancia a mis recientes palabras—. Iré con papá, también quiero un masaje.

—Aria, vienes de inmediato para aquí—voltee a verla, ella estaba abriendo la puerta—. ¡Aria Lenn Riggs! —y la cerro, ignorándome.


Pase mi mano por el cabello, frustrada. Esta niña actuaba como una adolescente de quince años teniendo solo cinco.

Me senté en el sofá y deje escapar un suspiro, agarre mi celular y empecé a ver mis redes sociales. Entre al perfil de Facebook de Aria, de foto de perfil tenía una con Justin y ambos hacían piquito de pato, sonreí y le di me encanta.

Me llego una notificación de una etiqueta, era de un canal de televisión donde Justin había ido a hablar varias veces desde que empezó a ser famoso. Era un recopilado de recuerdos de él, como un homenaje deseándole buena suerte en el comienzo de Tour de este año.

Le di me encanta y comente.


Nefery Thomson ha comentado una publicación.

"¡Que hermoso detalle! Gracias por tanto cariño, xoxo."


La puerta del camerino se abrió y apareció Alfredo, amigo íntimo de Justin.


—Hola Fredo—salude con una gran sonrisa, él me sonrió.

—Hola Nefer, vengo a decirte que Justin solicita tu presencia en el spa.

Asentí—. Gracias, en unos segundos estoy ahí.


Él asintió y desapareció por la puerta, últimamente andaba raro, no era el mismo Fredo de siempre.

Guarde el celular en mi bolsillo y salí del camerino, mientras me dirigía al spa iba saludando a todos que andaban de aquí para allá, organizando todo para que salga a la perfección.

Llegue a la puerta del spa y abrí sin golpear la puerta, por un extraño motivo había un gran silencio. Mire las camillas y estaban vacías, todo parecía como si no hubiese nadie. Abrí la puerta de la derecha y me encontré con la sala de vestuario, varias cosas estaban en el suelo como si hubiese pasado un huracán y enfrente mío estaba el sofá donde se encontraban durmiendo unos cansados Aria y Justin.

Sonreí con dulzura y saque mi celular, para después sacar una foto y dirigirme a Instagram.


@N_Thomson ha subido una foto.

"Mis pequeños"

"Mis pequeños"

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Al instante muchos comentarios y me gustas aparecieron, todos halagando lo adorables que se iban. A los minutos mi celular vibro con el típico tono de WhatsApp, abrí el mensaje y me sorprendí al ver de quien se trataba.

Exacto, de un enojado Chandler.


"Quiero que me traigas a mi hija a casa, ahora."

Fruncí mi ceño, molesta.

"¿Ahora resulta que es tu hija? Lo siento, no puedo, hoy tiene que estar presente en el concierto de su padre."

"¿Desde cuándo tengo que dar un concierto hoy? Por favor, Nefery, tráeme a mi hija y déjate de estupideces."

"Hoy no se puede, Chandler, tu déjate de estupideces."


Y bloquee el celular, para después acostarme junto a mis dos adoraciones y cerrar mis ojos, sintiendo como caía en los brazos de Morfeo.




El show había empezado, Justin bailaba y cantaba mientras sus fans gritaban eufóricas, Aria hacia lo mismo, admiraba a su padre.

Yo estaba preparando la corona de flores que sería entregada a la OLLG de esta noche. Una OLLG es una fan que es seleccionada y subida al escenario, para ser sentada en un trono y que Justin le cante una canción jurando que jamás estaría sola.

Casi siempre la seleccionaba yo acompañada de dos guardaespaldas, y solo faltaban minutos para eso.

Baje las escaleras y me adentre entre la multitud, vestía un tapado color negro, una gorra negra y unos lentes negros, busque con mi vista a alguna chica; tranquilamente podría agarrar a cualquiera, pero yo quería ver a quienes en verdad se lo merecían, quienes en verdad amaran a Justin.

A lo lejos vi a una chica rubia, ojos celestes y que estaba llorando mientras grababa a Justin con su celular, tenía una remera de él y estaba acompañada por un chico que sonreía mientras la contemplaba.

Esa sonrisa yo la conocía.

Baje los lentes y me corrí a un costado para tener un mejor ángulo, mis ojos casi se salen de su órbita, abrí mi boca con asombro.


¿Qué hacía Hana Hayes junto a Chandler en esta noche?


After the pain ➸chandler riggs. |STDV|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora