Perfect man ; Jackbam.

06:Basta de mentiras.

3 meses después.

Jackson no había dejado de visitar constantemente a Jinyoung, sabía que él podría tener cualquier tipo de información nueva sobre BamBam. Iba al menos tres veces a la semana. No quería ser molesto, pero realmente le importaba Kunpimook.

– ¿Hola? ¿Bambie?– habla Jinyoung.

– Hey, buenas nuevas, amigo.– dice alegre.

– ¿Que pasa?– interroga su amigo desesperado.

– Volveré a Corea, en unos tres dias.– informa.

– ¡Al fin! ¡Te extraño!– Jinyoung hace un puchero al decir eso, aunque su amigo no lo estaba viendo.– ¿Estas de acuerdo con que le diga a él...?– duda.

Un suspiro se escucha desde el otro lado de la línea.– ¿Aún pregunta por mí?

– Es en serio, Bambam. Ese chico no deja de venir a mi casa preguntando por ti. O si se alguna cosa nueva de ti.– asegura.

– Dile que se aleje...

– Lo hago, pero no hace caso. Entiéndelo, Bambam.– le suplica.

Por muy amigo que fuera de Kunpimook, quería lo mejor para él. Su amigo siempre quería tener la razón aún cuando no era así. Jinyoung le había agarrado cariño a Jackson, sabía que era un buen chico, y quería que Kunpimook notara eso.

– ¿Que carajo quiere que entienda?– le grita.

– Tú le gustas, y mucho...– dice con voz frágil.

Enseguida se escucha un suspiro del otro lado de la línea.– Nos veremos en tres días, adiós.– Y sin esperar una respuesta por parte de Jinyoung, solo colgó.

Jinyoung se golpeó la frente, mientras no podía evitar pensar en lo tonto que resultaba ser su amigo. Tenía un chico maravilloso y guapo babeando por él, y como hacía siempre, quería alejarlo. Antes de que pudiera seguir perdido en sus pensamientos, a su teléfono llegó un mensaje. Mensaje que enseguida reviso.

Bambie♥︎

Por favor, no le digas que volveré. Si lo haces, no te perdonaré jamás, Park Jinyoung.

Enviado a las 11:30 am.
Leído a las 11:30 am.

• • •

Jackson camino hasta su casa luego de su asquerosa y fatigosa larga tarde de trabajo. No podía quejarse, parecía que cada día sus clientes se hacían más y más numerosos. Se estaba volviendo un psicólogo conocido, o quizá era porque la gente día a día era más demente. Más única. Más problemática. Más ella misma. Por eso, la gente suele juzgar tanto, cuando una persona se quiere tanto a si misma, tienden bajarle él autoestima a toda costa, lográndolo. Haciendo que la gente llegue al punto de sufrir de una horrible depresión. Y así es como Jackson conseguía pacientes diariamente.

Sin embargo, así se sentía Jackson en ese preciso momento. Se sentía deprimido.

¿La razón?

Kunpimook. Cualquiera pensaría que es una exageración, enamorarse tanto de una persona que a penas conoces, a tal punto de caer en una asquerosa depresión. En otro tiempos Jackson creería eso imposible, pero ahora lo estaba viviendo el mismo. Estaba comprobando que caer en depresión por amor era algo real.