Capitulo 12

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Las tropas volvieron al castillo junto con la reina y los demás, ahí trataron las heridas de todos y encerraron a todos los capturados
Evie y Mal luego de ser tratadas se fueron a la habitación real y cerraron la puerta con llave

-tu y yo merecemos un momento- dijo Mal sentándose en la cama y extendiéndole la mano a Evie quien la tomo y se sentó con ella

-creo que estamos algo maltratadas para hacer algo ahora- dijo la Peliazul con una picara sonrisa

-malpensada- Mal le golpeo juguetonamente el hombro-

Evie la tomo del cuello y la beso lentamente, al separarse le dijo

-estuviste genial allá-

-solo queme cosas- rió la pelimorada

-no, hiciste mucho más, lideraste a una gran tropa y ganaste un combate sin tener que matar a tantas personas, solo algunos heridos de nuestro lado-

-pero tu saliste herida princesa-

-estoy perfectamente, solo es un rasguño- Evie se subió un poco la blusa y miro la herida suturada y limpia-

-la idea era que no hubiera sangre-

-M, esto es una guerra, tu no lo quisiste así pero Uma si, y por ser la reina debes proteger a tu reino, cueste lo que cueste-

-ya ni siquiera se sí ser reina es lo que quiero, tal vez debería dejar que elijan a otro, después de todo fui coronada por ser la prometida de Ben, sin el no debería tener derecho al trono-

-no, tu ya eres reina por ley, te coronaron en una ceremonia digna, y además después de todo lo que has hecho por el reino no creo que les importe que seas la "legítima heredera"- Evie le hablaba con amor

La Peliazul tomo las manos de la reina y miro sus muñecas vendadas por las quemaduras

-estas heridas son más fortaleza para ti y para el reino- y dicho eso se las beso

-gracias E, te amo- la pelimorada le sonrió y beso su mejilla

-también te amo mi dragón-

Estaban por besarse de nuevo cuando tocaron la puerta
Mal rodó los ojos y se levantó para abrir

-Mal somos nosotros- se escucho la voz de Carlos

La reina abrió y Carlos y Jay entraron

-que ocurre?- pregunto la pelimorada

-primero digan ustedes que tienen- dijo Jay señalando a ambas chicas

-de que hablas?- pregunto Evie algo nerviosa

-vamos no se hagan las locas- intervino Carlos- siempre se van juntas, Evie tiene las dos semanas que han pasado desde el ataque durmiendo en otro lugar, y tu Mal has superado demasiado bien la muerte de Ben-

-crees que eso aún no me duele- Mal sonaba ofendida- cada vez que pienso en eso me siento culpable, quieren la verdad, pues aquí la tienen, Evie y yo estamos juntas, antes de conocer a Ben yo la amaba, y no me mal interpreten, amaba y sigo amando a Ben y lo haré por siempre, pero tengo el derecho de continuar con mi vida se que el hubiese querido que lo hiciera-

Jay y Carlos se quedaron mudos tras la confesión de la reina
Evie se acercó a su novia se puso a su lado y paso un brazo por sobre sus hombros

-me debes 20 dólares- dijo Jay con una sonrisa

-no- dijo Carlos también riendo- tu apostaste que sería después de capturar a Uma, yo dije que antes

Jay saco su billetera y le dio el billete a Carlos

-ustedes lo sabían?- pregunto Evie

-era bastante obvio Queen- dijo Jay- desde que fueron amigas en la isla lo sospechamos

-luego cuando llegamos aquí lo dejamos de creer- continuo Carlos- pero siempre se mantuvo una pequeña chispa

-y ahora en os aquí- dijo Evie

Los 4 se miraron

-creo que ya esta entonces todo resuelto- dijo Mal

Los demás asintieron

-y le dieras al reino?- pregunto Carlos

-a su debido tiempo si, no quiero que Evie sea conocida como la chica que anda con la reina, quiero que se le conozca como la novia, luego esposa y segunda reina de Auradon- dijo Mal con mucha seguridad

Evie la miro gratamente sorprendida

-entonces quiero que sepan que las apoyamos- dijo Jay

Los 4 descendientes se abrazaron hasta que otra vez alguien toco la puerta

-adelante- dijo la reina

-majestad- dijo Lumiere entrando y haciendo una reverencia-

-que ocurre?-

-el príncipe Chad demanda una audiencia con usted- informo

-dile que se espere- dijo Mal-

-no quiero sonar imprudente majestad, pero creo que debería ir ya, el príncipe sonaba muy enojado y dijo ciertas amenazas hacia su nombre- dijo el fiel Lumiere

-gracias Lumiere, informales que iré en seguida-

-a sus órdenes majestad- dijo y se fue

Tu siempre estuviste ahí - MevieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora