« OR NAH? » // MAGCON

39.

Las pasadas semanas han sido una tortura para mí, James Mcavoy había enviado a Brook para que regresara con él a New York para empezar a modelar los diseños de la nueva temporada que venía. Fotos, desfiles, maquillaje, peinado, todo me tenía ocupada no tenía tiempo de siquiera hablar con los chicos. Mis hermanas salían a reuniones con Pretty Little Things y poco tiempo las veía, solo Brooklyn era el que estaba más tiempo conmigo y eso porque era mi compañero de trabajo.
No sabía nada de Cameron, Aaron o Shawn. Así que con el dinero que iba ganando compré un departamento en NY para no molestar a mis hermanas.

— Llegamos señorita Bett — habla Smith, el chofer que me había asignado James.

— Gracias Smith, te extrañaré mucho — bajo del carro y agarro mi maleta.

Entré con muchas ansias de ver a mis mejores amigos, según sabia Shawn se iba a quedar en LA un buen tiempo. Solo espero que la información que le dio Ashley a Brooklyn haya sido la correcta. Saco mi llave y la meto en el cerrojo, los nervios corren por mi médula espinal y empujo la puerta abriéndola.

— Oh vamos, deberías de saber poner un pañal eres mujer yo no...Oh por dios — Cameron me ve asombrado y corro hacia él sin pensarlo dos veces.

— ¡Estás aquí! — grita cargándome y dando vueltas conmigo, río y lo abrazo fuerte oliendo la loción que tanto me encanta.

— ¡Te extrañé mucho CamCam! — me baja sin dejar de abrazarme y besa mi cabello repetidas veces.

— Te odio, nunca contestaste mis mensajes. Mala amiga — la voz de Lox llega a mis oídos y me separo del castaño para abrazar a la pelirroja.

— Lo siento, te juro que te lo recompensaré — digo y me acerco ahora a Aaron, pero me separo de él al oír pequeños balbuceos.

Toda felicidad se drena de mi cuerpo al ver al pequeño ser acostado en el sofá — Cam...— me acerco cuidadosamente y me topo con los pequeños ojos azules como el cielo.

Es su hijo.

— Dos meses atrás Lucy entró en parto y... La prueba de ADN se hizo — susurra Cameron.

— No,no,no,no. No comprendo, creí que...

— Las pruebas no mienten, no es mi hijo Annie pero no puedo dejarlo solo.

Las lágrimas inundan sus ojos y Lox lo mira con tristeza  — Si no es tuyo ¿porqué  está aquí?

— Lucy murió en el parto — dice Aaron.

¿QUÉ?

— Claro que no — lo desmiente Cameron y vuelvo a respirar con tranquilidad.

— ¿Entonces?

— Lo trajo y me dijo que estaba muy arrepentida de que no fuera mío y luego su celular empezó a sonar, salió y no ha regresado.

— ¿Cuánto ha pasado desde eso?

— Dos horas.

No puedo creer la clase de persona con la que se metió mi mejor amigo.

— Maldita arpía — un llanto nos saca de la plática y veo a Cameron volverse paranoico.

— ¡Mahogany!

— ¿Qué?

— Pensé que ya habías cambiado al bebé.