Capítulo 3

2.1K 153 69
                                    

KEITH

Respiré aliviado al ver que la persona que yacía en el marco de la puerta era nada más y nada menos que mi querido cubano de ojos azules. Lo miré directamente a los ojos pidiendo auxilio y el pareció captar el mensaje. Sentí como sus ojos me recorrían el cuerpo entero, cosa que me hizo acalorarme aún más. Cuándo acabó de desvestirme con la mirada se apresuró a desatarme las muñecas y seguidamente los tobillos. Cuándo no tuve nada que me amarara, Lance se abalanzó sobre mi en un cálido abrazo. Con las pocas fuerzas que me quedaban correspondí aquel abrazo agarrandome su chaqueta. Seguía igual de acalorado y jadeante que antes, o incluso peor. Quería salir de ahí cuanto antes.

-Lance- dije captando su atención. Mi voz salió como un suspiro más que como una palabra - sácame de aquí - supliqué mirandolo directamente a los ojos. Rápidamente me cargó al estilo "princesa" y caminamos por los largos pasillos. Pude ver como después de recorrer varios pasillos Red aparecío delante de mis narices.
Nos dejó adentranos en su interior y pude ver a Shiro de pie con semblante impaciente y exhausto.

-Keith!-exclamó mi "hermano'- gracias a dios que estás bien...

-Shiro, me han hecho algo, me siento raro... - logré pronunciar con dificultad puesto que cada vez me sentia más acalorado y débil.

- No pasa nada, ya estás con nosotros.- contesto el mayor dedicandome una mirada tierna, como las que me dedicaba antes de desaparecer. Sonreí con tan solo pensar en esos tiempos.

-Ven Keith, toma asiento-dijo Lance señalando su regazo. Miles de cosas indecentes pasaron por mi mente en ese instante. Simplemente asentí.. -Shiro, maneja tu a Red, yo me quedaré aquí con Keith.- Exclamó Lance. No entendía porqué siempre se comportaba como un idiota conmigo y luego mágicamente no podía evitar protegerme. Se acercó a la silla que estaba desocupada y se sentó. Yo me senté en su regazo dándole la espalda a el moreno. En ese momento el cubano me rodeó la cintura con sus brazos.

-Mmmh Agh!- no pude evitar gemir ante ese tacto. Mi cuerpo se contrajo y subió su temperatura rápidamente.

Sus manos se desprendieron de mi cuerpo un segundo para, posteriormente, comenzar a acariciar suavemente mis dorsales.

- Mmmhh Aghh mmh!- volví a gemir- Lance, p-para, me estas haciendo sentir r-raro.- y no mentía. Mi cuerpo estaba cada vez más caliente. Mi parte trasera volvía a estar húmeda, el tacto de las manos de Lance sobre mi cuerpo me estaban volviendo loco.

-Todo bien ahí atrás?- preguntó Shiro.

-Shiro, algo le pasa a Keith- dijo el moreno preocupado.

En ese punto yo ya no podía dejar de gemir. Mi parte trasera parecía una cascada y sentía que mi cuerpo estaba a más de 50 grados.

-No te preocupes Lance, ya hemos llegado al castillo.- anunció Shiro.
Lance me volvió a cargar y junto con Shiro nos apresuraron en a buscar ayuda. 

-Chicos, hemos encontrado a Keith, pero algo no está bien. Necesitamos ayuda!.- gritó Lance.
Segundos después apareció el resto.

-Que ocurre? Preguntó Allura. Luego poso su mirada en mi y comprendió todo.-Lance sígueme.- ordenó la alteana. El moreno asintió y siguió a Allura por los pasillos.
Nos detuvimos delante de la enfermería y entramos en la blanca habitación. Lance me dejó suavemente en una de las camillas.
Allura rebuscó en uno de los cajones en busca de algo que pudiera aliviar mi calor. Cuando pareció encontrar lo que buscaba se giró hacia mi con un objeto en mano.

-Puede que duela, prepárate.- sentenció Allura para seguidamente clavarme una especie de aguja en la pierna. Solté un grito ahogado. No tardo demasiado en hacer efecto, ya no me sentía tan acalorado ni jadeante. En cambio mi parte trasera seguía aún húmeda. Allura salió de la habitación dejándonos a los dos a solas.

Something just change <<KLANCE>> Där berättelser lever. Upptäck nu