Mi vida siempre había estado tan perfecta como podía tratar de hacerla: tareas, deporte, bailes, reuniones... Todo marchaba bien.
Pero no imaginé que tras la aparición de uno de los príncipes más codiciados del mundo mi vida se iba a desboronar par...
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Mi vida siempre había estado tan perfecta como yo podía tratar de llevarla; tareas, deporte, bailes, reuniones... Todo marchaba bien.
Pero no imaginé que tras la aparición de uno de los príncipes más codiciados del mundo mi vida se iba a desboronar para siempre. Y tampoco creí que una simple personita me cambiaría tanto física como mentalmente. Mucho menos contaba con su hermano y su carácter.
Siempre tuve mi vida planeada, pero ninguno de los dos podría escapar de algo tan relativamente drástico: el destino.
