FETISH » duamila ft. camriana

12

Tengo una guerra dentro de mi cabeza, donde intento escribir tu nombre bajo la lluvia.

Caminaba de un lugar a otro, estaba inquieta esperando la confirmación de la propuesta de proyecto que había enviado. Miré a través de la ventana, Camila estaba en el jardín, cerca de la piscina.

Solo llevaba una camisa blanca demasiado grande para ella, descalza, con el cabello un poco en desorden.

Un momento, ¿esa es mi camisa?

Vi que estaba jugando con el pequeño conejo entre sus brazos, escuchaba su risa.

Alguien llamó en la puerta, y al abrir me encontré con la madre de Camila.

-Dua, cariño, ¿tienes unos minutos para que charlemos?-.

-Sí, adelante-.

[...]

La señora Estrabao hablaba del lugar, de su familia y me agradecía por cuidar a su hija, mientras ella bebía un poco de vino yo elegí un durazno, todo parecía tranquilo, hasta que Camila apareció en la entrada.

-Dua, ¿puedo pasar?... Hola mamá-.

Le indiqué que entrara, y a Camila no le importó que su madre estuviera frente a nosotras, llegó junto a mí, me dio un beso en la mejilla y tomó el durazno que estaba entre mis manos para robarle una mordida.

-Camila...-no dije nada más, su madre nos miraba mientras levantaba las cejas y dejaba su copa sobre la mesa.

-Hija, ¿qué crees que estás haciendo?-.

Camila me entregó de nuevo la fruta.

-Sólo compartimos comida mamá, no es como si me encontraras compartiendo...-su madre la interrumpió.

-Es suficiente- Sinuhe se levantó de la silla y sujetó el brazo de Camila-es hora de irnos-.

-Pero acabo de llegar-.

-Vamos-Camila protestó, pero su madre pareció no escucharla, se disculpó conmigo por el comportamiento de su hija, y a pesar de que le dije que no se preocupara ella me agradeció por todo antes de salir del apartamento.

Escuché como Camila discutía con su madre.

-Yo no hice nada malo...-.

Apoyé mi espalda contra la pared y miré al techo, quería evitar todo, incluso mis pensamientos pero los recuerdos comenzaron a regresar, todas aquellas escenas en las que me quedaba sin respuesta.

Camila me está arrastrando hacia algo desconocido.

¿Hasta dónde es capaz de llegar?