Capitulo 24

2.1K 261 1
                                    

Capítulo 24

Despertar y encontrarme con sus ojos verdes avellanas, me hicieron sentir que de pronto seguía teniendo un hermoso sueño.

_ Hola…_ dije débilmente, al verlo sonreír.

_ Hola…

_ No has dormido bien, ¿verdad?... Tienes una cara de horror… siento tanto que sea por culpa mía.

_ No importa. En realidad no importa…

_ Lamento no haberte dicho la verdad antes. Lamento no haber sido sincera contigo desde un principio…_ sentí el tacto de sus manos en ese instante, sintiendo el calor que emanaban.

_ No debería hacerte hablar… Se lo prometí a tu madre.

_ No importa… Debo hacerlo… He sido injusta contigo todo este tiempo al no decírtelo.

_ Adrianne, en verdad, no importa…

_ Matthew… Escúchame… Cuando me entere de que estaba enferma, sólo quería seguir como si tuviera una vida normal. Incluso el médico me lo recomendó._ respiré hondo_. Y luego apareciste tú en mi vida cuando decidí ir a Irlanda… Mi mundo y todo lo que quería se tambaleó nuevamente. Todo había sucedido tan rápido..._ guardé un corto silencio_. Tuve tanto miedo de hacerte sufrir, si te enterabas de mi enfermedad, cuando me admití que me había enamorado de ti, que por eso te pedí que no te enamoraras de mí… Sentía que podía vivir con la ilusión de ser tu amiga. Una que habías conocido al ella viajar a tu país… Pero tú lograste derrumbar todas aquellas barreras en mí. Soy culpable… Debí confesarte mi verdad… Lo lamento._ mis ojos se llenaron de lágrimas. Lágrimas que él secó con ternura con su mano derecha.

_ Adrianne…

_ Sólo escúchame… No he dejado de pensar en ti. Te he echado de menos. Ahora sólo puedo pensar que quiero seguir viviendo. Ver ese milagro que tanto he ansiado… Pero el miedo se apoderó de mí las muchas veces que intenté decírtelo. Pensé que…

_ ¿Me lastimarías si llegaba a saber que tenías cáncer, la misma enfermedad que tuvo mi madre?_ dijo al mirarme a los ojos, sintiendo y comprendiendo ese miedo que había estado en mí por tanto tiempo.

_ Sí, no quería ilusionarme contigo y después ver cuánto te lastimaba… Matthew, no es fácil decirle a alguien que estás enfermo… Y que estás luchando para ganarle a la muerte. Aunque escuches que no es tan grave la enfermedad que padeces y que tienes que seguir unas instrucciones y tomar unos cuantos medicamentos. Por eso me fui sin despedirme de ti. Por eso te deje aquella carta que de seguro has leído, gracias a Emily…

_ Adrianne… Nunca me alejare de ti. Esta será una lucha que venceremos los dos. Siempre estaré a tu lado… Te amo Adrianne. Te amo…

_ Yo también… Te amo… Matthew…

Se acercó un poco más a mí y me beso con ternura en los labios.

Seguí en observación, pero esta vez en aquella habitación que habían acondicionado para mí, hasta aquel día en que se llevaría mi operación. Recibí la visita de mi amiga, a quien le agradecí todo lo que había hecho por mí, y a su vez, disculpándome por todo lo que había tenido que pasar a causa mía.

Y pronto, aquel día que tanto habíamos esperado, llegó, haciendo que mis miedos volvieran a sentirse a flor de piel.

_Estarás bien… No tienes nada de qué preocuparte. Tu familia, tus amigos y yo estaremos aquí. Estaremos esperándote._ me había expresado Matthew, con ternura.

_ Entonces, prometo que no me preocupare…_ dije mientras él me abrazaba. Haciéndome sentirme tan segura en sus brazos.

_ Por cierto, se me olvidaba… Te traje un obsequio.

_ ¿Un obsequio? ¿A mí?

_ Sí, toma… ábrelo._ dijo después de sacarlo de una bolsa que había mantenido fuera de mi vista.

_ ¿Estás seguro que es para mí?..._ expresé con picardía_. ¿Qué es?

_ Sólo ábrelo…

Me recosté en la parte superior de la cama, mientras abría aquel obsequio con los ojos llenos de tanta ilusión y tanto brillo.

_ ¿Qué significa esto?_ expresé sonrientemente y algo asombrada, al abrirlo. Era una guía turística de Irlanda.

_ Esto significa que espero recorrer contigo los lugares que aún no conoces de Irlanda. Por lo que debes ponerte bien para que podamos planearlo juntos… ¿Ves? Dentro del libro hay un listado de los lugares a los que quiero ir contigo…

Verlo sonreír, me dividió el alma. No obstante, no estaba dispuesta a mostrarle lo nerviosa que me encontraba. No sería justo, cuando él estaba allí, dándome ánimos.

Pronto besé sus labios, antes de buscar una vez su mirada.

_ Te prometo que seré fuerte…_ susurré al colocar una de mis manos en su mejilla derecha_. Prepararemos todo cuando salga del quirófano y tenga suficiente fuerzas nuevamente. ¡Te lo prometo!

_ Es una promesa…

Sigo Pensando en Ti... Miss You (1er libro)Where stories live. Discover now