[Clexa AU] Cuando me elegí a mí

CAPÍTULO XV

Cuando sonó la alarma el lunes a las 8 de la mañana no podía creérmelo. Tenía esa sensación en el cuerpo de que sería mejor no salir de la cama en todo el día, pero había decidido ser una persona adulta, útil y madura para la sociedad, y eso implicaba salir de la cama aunque no se quisiera. Suspiré y me dirigí a la ducha mientras se hacía el que, sin lugar a dudas, sería el primer café de ese día.

Llegué al andén justo cuando las puertas del metro se cerraban. ¿Otra señal de que quizás debería haberme quedado en casa? El paseo hasta la oficina se me hizo más largo de lo normal, ¿El calor, quizá? Iba pronto, así que decidí parar en la cafetería y coger otro café para soportar la mañana. Y de nuevo otra señal. La cola casi se salía por la puerta y ni rastro de una Octavia dispuesta a hacerme el café para que me la pudiera saltar.

A los pocos minutos escuché un "Alexandra" desde la barra, y levanté la mirada. Ni siquiera me había dado cuenta de que estaba ahí. Recogió como pudo dos cafés a su nombre intentando que no se le cayera la guitarra y me sonrió, haciéndome ver que uno de ellos era para mí. Igual el día todavía podía mejorar. Nos sentamos en uno de los sillones que había libres.

- ¿Qué haces por aquí, Lex? No sabía que hoy venías. –Sonrió mientras removía su café.

- ¿No has hablado con Anya?

- No de ti. –Me callé un momento— Hoy por lo menos.—me miró interrogante pero sin añadir nada más—Va, dime. Sois horribles las dos, siempre compinchadas contra mí.

- Vamos a empezar ya con la grabación del disco. Bueno, del single de momento.

- ¿Ya? ¿Y eso? ¿No decías que no tenías prisa y eso?—Me puse en modo grupi ante la perspectiva de tener música nueva de Lexa Woods.

- Quiero que la gente lo oiga, la verdad. –Se relajó y se dejó caer contra el respaldo del sofá.

- Pero a mí ni un adelanto pequeñito...— puse unos pocos de pucheros para hacerla sentir un poquito culpable por no haberme querido ni enseñar la letra de sus canciones nuevas.

- Clarke. Vas a estar presente en la grabación. Creo que es suficiente adelanto ese.

- Vaya forma de tratar a tu novia, Alexandra. –La vi mirando a los lados como si ocultara un delito gravísimo.

- Clarke.—Me dijo seria, regañándome. Claro que sigue sin haber cambiado nada. Se acabó el buen rollo mañanero. Ganas de volver a la cama... Creciendo por momentos.

- Tengo que ir para arriba ya—intenté cambiar de tema.—¿Subes conmigo?

- Sí, venga. –Se levantó cogiendo los dos vasos de cartón ya vacíos y se acercó a una de las papeleras. –Me coges la guitarra, por favor.

Subimos a la oficina y había un par de músicos de Lexa ya esperando allí. Eran el batería y el bajista. La mañana empezaría con sus grabaciones.

- Clarke, conmigo. –Anya ya no daba ni los buenos días. La seguí hasta su mesa.—Te ha contado ya Alexandra, ¿no?

- Sí, hoy empiezan con el single.

- Están terminando de montar la batería y microfonearla, así que empezaremos en breves. Antes de que te unas a nosotros necesito que hagas un par de cosas. Vamos a convocar otro concurso ahora en septiembre como el que ganaron los Grounders. Necesitamos carne fresca para acabar bien el año. Recupera las bases de ese concurso y haz un cartel, encárgalo o lo que te apetezca. Muévelo por ahí y llama a los Grounders, quiero un video de esos de "qué nos ha permitido ganar el concurso y porqué debería de presentarse gente nueva". – yuhu.