Capítulo 22

2.7K 156 22
                                    

Me encuentro en la veterinaria esperando que mi hermano despierte. Al parecer Deaton lo encontró inconsciente en el bosque luego de que los cazadores le lanzaran una flecha y ahora se encuentra recostado en la mesa.

De a poco comienza a pestañear y de golpe se levantó. Me acerco corriendo a él y lo agarro del hombro.

-Heeey... bienvenido al mundo de nuevo, ¿Te sientes mejor?- pestañea unas cuantas veces y se marea un poco- creo que deberías sentarte.

El ruido de la puerta de entrada nos interrumpe. Alguien entró a la veterinaria, y ese alguien es Peter Hale.

El miedo recorre mi espalda y hace latir mi corazón diez mil veces más rápido y Scott se encuentra igual. Deaton sale a hablar con el psicópata y nosotros dos nos sentamos en un rincón de la veterinaria, tratando de calmar los latidos de nuestros corazones que están a punto de colapsar.

-Vine a recogerlo.

-Lo siento, pero no creo que lo haya dejado aquí.

-Vino solo, pero lo necesito.

-Lo lamento, está cerrado, pero puede regresar cuando abramos.

Escuchamos como Peter trataba de que Deaton lo dejara pasar, pero algo pasó que lo hizo detenerse.

-Ceniza de montaña.

-Déjame ser claro. La clínica - está - cerrada.

-Está bien, pero sepan que otros me ayudaran... otros más... inocentes.

-ALLISON!- Exclama Scott al entender a qué se refería el alfa.

Tomo la mano de mi hermano al notar su miedo y al mismo tiempo, Deaton entra en escena nuevamente.

-Creo que deberían irse. Ambos.

-Pero...

-La clínica está cerrada y ambos necesitan descansar de toda esta locura.

Miro a Scott y coincidimos en irnos.

Ya afuera comienzo a caminar rumbo a casa, pero luego de unos pasos me doy cuenta que mi mellizo se quedó atrás.

-¿Scott?¿Qué tienes?

-Emm... no lo soporto más. Yo solía tener una vida normal, aburrida. Solo Stiles, tú y yo. Mamá y el Sheriff enojados eran nuestros mayores problemas, pero ahora todo es tan complicado... tengo miedo... miedo de que le suceda algo a alguno de ustedes culpa mía.

-Scotty, yo también tengo miedo, pero eso es lo que nos mantiene alerta, lo que nos mantiene luchando. Yo sé que todo esto es nuevo para tí, pero también sé que lo vas a poder superar y que vas a poder cambiar las cosas. No sé si hay una cura, pero sé que, si no la hay, lograrás sacarle sus beneficios y no solo las desventajas de ser hombre lobo. Además, tienes una hermosa, inteligente, divertida y sensata hermana que estará ahí en cada momento cuando la necesites, por no mencionar también a un torpe chico de lunares que siempre está.

-Gracias... sé que pasaste por mucho cuando estabas lejos nuestro, pero quiero que sepas que no hubo ni un solo día que no deseara estar al lado de mi hermanita, y también, que siempre voy a estar para cuidarte, mimarte y sobreprotegerte, ¿o no es ese el trabajo de los hermanos?

Corro hacia él y me cuelgo de su cuello como un koala. Lo abrazo como hace mucho no lo hacía y luego le lleno la cara de besos babosos para luego separarnos y comenzar a caminar.

-Hey, Scott...¿Qué si te dijera que quiero que Stiles y tú me acompañen a Nueva York?

-Me encantaría, ¿Por qué?

A Shadowhunter in Beacon HillsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora