Arranged [ spanish version ]

capítulo treinta y ocho

Canción del capítulo: Only You de Selena Gomez.

“All I needed was the love you gave,
All I needed for another day,
And all I ever knew, only you.

[ Lea ]

Cuando llegué a casa de la estación de policía, me lancé a la cama a llorar. Eso hice toda la noche, llorar por mi vida, por lo que pareció para siempre.

El día anterior, había perdido oficialmente a mis padres.

Hoy era sábado; un nuevo día y una nueva oportunidad de empezar de nuevo. Un día sin lágrimas. Porque, ayer, finalmente los había dejado ir. Nunca pensaría en ellos de nuevo. Ellos sólo eran recuerdos llenos de resentimiento. Pero ya no significaban nada para mí.

En lo que iba del día no había escuchado o visto nada de Justin. Era fin de semana, lo que significaba que iba a tener unos días libres, pero no lo había visto por la casa. Fruncí el ceño, tratando de pensar en dónde podría estar, pero me di cuenta de que eso no importaba.

Él necesitaba vivir su vida.

Salí de mis pensamientos, escuchando el microondas pitar. Había tenido una terrible necesidad de un poco de chocolate caliente. Afortunadamente, Justin tenía un poco.

Saqué la taza con leche, antes de verter un poco de chocolate dentro. Normalmente, habría hecho las cosas de la manera propia, pero hoy me sentía extremadamente cansada. Mezcle el chocolate, asegurándome de que todo se disolviera.

Llevé la taza hasta mis labios para probar.

Delicioso.

Sonreí, tomando asiento en un banquito. Hasta el momento, no había devuelto nada de lo que había comido. Gracias al cielo, los gemelos me habían dejado tener un desayuno decente. Era como si ellos supieran que su mami no lo estaba llevando bien.

Me abstuve de llevar una mano a mi estómago. Aún seguía plano, pero sabía que era sólo cuestión de tiempo para que comenzara a aumentar de peso. Fruncí mis labios mientras recordé algo que tenía que hacer.

Tengo que contárselo a Justin.

Tarde o temprano las cosas comenzarían a notarse y él me preguntaría. Además, de que él era el padre de mis hijos, tenía derecho a saberlo.

El sonido de la puerta de entrada siendo abierta atrapó mi atención. Tragué otro poco de chocolate caliente con nerviosismo.

Tenía que decírselo ahora.