Dæmon Øjne (Ojos De Demonio.)||Frerard.

-Angel Eyes, Demon Cries-

Frank se levantó de la cama, esperando tener suerte ésta vez, había estado buscando a Gerard por 1 maldito año y aún no habían señales de él.

La mierda de tener que dormir y cuidarse al ser un humano lo tenía agotado.
Sus ojos eran fuente de diversión para él ya que podía controlar la mente de aquellos ridículos mortales con ellos.

Más de la mitad de hombres y mujeres caían rendidos a sus pies sin tener que hacer nada, pues los humanos se obsesionan con la belleza propia y contraria.
Frank, al ser un demonio, naturalmente tenía encantos, la piel pálida, cabello castaño, no era alto pero era lindo y la marca del infierno en su cuello, que era un alacrán. Aunque los humanos pensaban que era un "tatuaje" los cuáles Frank fue adquiriendo y descubriendo en ese año en la tierra, porque eran dibujos que permanecerían ahí en su cuerpo y si alguna vez lograba regresar al Hellgard, sería envidiado por todos.

Frank había recorrido 2 países y la mayoría de USA en ese año, esperando encontrar al pelinegro.

En éste momento se encontraba en New Jersey, el pelinegro no daba señales.

Al ser humano, Frank se iba a divertir aún si no encontraba a Gerard, así que hoy, Frank salió por la calle a cazar presas y saciar su sed de diversión. Lo que fuera estaba bien, hombres o mujeres, él quería algo muy específico.

Entró a una cafetería para comprar uno de aquellos brebajes, era tal vez lo mejor que tenía ese lugar, el café.

Una vez que había controlado a la cajera para que no le cobrase, salió a la calle, viendo a un chico al otro lado, que le llamó la atención. Él sería su presa hoy.