Doble Cara

Verdad

Una semana había pasado y Lucy no se atrevía a salir de su casa, no lo deseaba. Quería ocultar su realidad su terrible realidad donde Natsu era un desgraciado y Gray ya no existiera... Que aria... Sin Gray.

No se atrevió a ir a su funeral, Gray quedo huérfano a muy corta edad... Así que Lucy era su única familia o al menos eso siempre le decía a ella.  Sus ojos estaban hinchados de tanto llorar sus labios estaban blancos de la falta de alimentos y agua.
Sabia que nada se resolvería si solo se encerraba en casa, Natsu no volvió después de aquel suceso y ella agradecía su ausencia mas Levy y Erza seguían visitándola más se negaba a comer o hablar.

-¡Lu-chan! Nos vamos a casa... Ya es tarde te deje la comida en el comedor... Por favor comela esta vez..- suplico Levy, sin respuesta de aquella que se encontraba del otro lado de la habitación

-¡Lucy! Espero verte pronto... Duerme como es debido si?- le suplico Erza

-Si... - susurro la Rubia causando una leve sonrisa en sus amigas.

El cerrojo de la puerta indico que en efecto se encontraba sola, salio de la habitación y encontró una bandeja tenía una deliciosa, o al menos así lo notó ella, una deliciosa carne con un fresco jugo de naranja su favorito, se sintió mal por no haber probado bocado en tanto tiempo desperdiciando la comida como el esfuerzo de sus amigas. "La comida jamás se desperdicia Lucy" la voz interna de Gray la hizo llorar, inclinada frente al plato de comida lagrimeaba.

-¡Lucy!- el grito de preocupación la hizo alzar la vista, se encontró con Natsu observándola con... ¿Tristeza? Su semblante cambio de inmediato su piel palideció en un segundo comenzó a respirar con dificultad y retrocedió por instinto ¿que tenia aquel hombre? su aura su ser, era misterioso y a la vez... Solitario.

-Lucy... ¿Por que no as comido bien? Erza y Levy me lo han dicho apenas y comes o duermes ¡no ves que eso afecta tu salud!- le regaño colocándose a su altura

Lucy apenas y podía respirar de los nervios, quien se creía el un día se mostraba preocupado y al otro la trataba cual prostituta.

-No he tenido hambre...- susurro en silencio

- ¡pero que dices! No te das cuentas estas pálida — le regaño ayudándole a colocarse de pie — anda ve a tu cama te ayudare a comer — 

Lucy se coloco en la cama, sabia que el podía abusar de alguna u otra forma, pero estaba hambrienta y muy débil para poder hacer algo en su contra, su mente ya no pensaba con claridad.

—Lucy ¿Que ha caso deseas morir?—esa pregunta la hizo estremecer Natsu corto un poco de carne y la acerco a la boca de la rubia, sin dudarlo comio sabia que algo preparado por Levy no era peligroso.

—escucha Lucy... Yo...—
Un fuerte zumbido detuvo la conversación el teléfono de Natsu comenzó a sonar y vibrar como loco, este observó quien interrumpía su "mágico momento" chasqueo la lengua y salio de la habitación sin decir palabra alguna, Al parecer respondería en el pasillo.

"No puedo solo llorar"
Aquellas palabras resonaron en el interior de Lucy en pequeños pasos se acerco a la puerta con la esperanza de poder escuchar algo.

—¡que acaso eres idiota, Entiende eso ya quedo cancelado! Ahora yo pondré  las reglas, claro que me are cargo de tu familia, no te preocupes por nada, el imperio Dragneel ahora también te cobijara —  la potente voz de Natsu asustaba pero... De cierto modo le intrigaba, ¿Quien...era en verdad ese hombre? La llamada culmino y con ella Lucy corrió a su cama, no ya no... No lloraría mas la muerte de Gray, no se preguntaría por que la vida es tan cruel con ella, no mas dudas ni lamento ahora solo tenía algo en mente... Descubrir por que aquel hombre entro en su vida y saber realmente cual era... ¡Su verdadero rostro!

—perdona Lucy, una llamada del trabajo — se disculpó tan carismático como siempre

— ¡Si! ¿Puedo comer mas? — preguntó con una sonrisa, mas Natsu la observo y tomo su rostro con mano sujetando con fuerza los labios.

— pero que haces, ¿crees que esa falsa sonrisa hará efecto en mi? Te conozco muy bien Lucy se cuando finjes , cuando estas triste incluso podía leer en tu rostro cuando aquel idiota acababa de hacerte el amor! — esta ultima frase le puso furioso.

— Na-Natsu...- suplico pues apenas y podía abrir la boca.

—Si no quieres sonreír, si ahora me temes no es necesario que finjas, después de todo... ¿Como podría matarte? Ahora eres mía, yo no daño lo que es mio, al contrario lo atesoro para que nadie lo toque —  sonrió acariciando los cabellos de Lucy soltando suavemente su rostro clavando un beso apasionado al final, Lucy le empujo lejos, no sabia como pudo hacerlo enfureció lo odiaba eso era seguro, le odiaba por todo... Por ser alguien tan imprudente y sínico.

— ¡Tu ya tienes a alguien! ¿No lo decías siempre? Incluso me mostrabas fotos de bodas, vestidos precios, siempre... Siempre me decías que le amabas, que ella seria tu esposa, que tantos años, desde jóvenes, fotos de ustedes desde jóvenes juntos y felices ¿¡por que!? ¿¡Por que nos haces esto!? ¿Acaso no te duele? ¡Lissana! — su garganta dolía de haber alzado la voz, necesitaba agua un buen baño y dormir, pero se mantenía firme.

—¿Por que llegar a tanto sólo por mi? Si tu ya tenías a alguien...—

—¡Ja! No me hagas reír Lucy, esa perra No te llega ni a loa talones — dijo saltando sobre la chica — si te comparas con algo tan bajo pierdes tu atractivo sabes — completo antes de forzarla a besarle, de nuevo intento tocarla más Lucy esta vez forcejeo no mas, ya no... No tendría miedo.

—entiende Lucy, ¡ahora eres mía! — succionó con fuerza el cuello de la chica dejando un marcado chupetón.

—Termina tu comida, y espero verte mañana en clases — le ordenó antes de salir de la habitación.

¡Chan chan chan!
Estoy tan feliz que mi obra este siendo ¡tan aceptada! 

Espero les guste tanto así como yo disfruto al escribir 
Muchas gracias a todas aquellas que siguen mi obra desde que comenzó y gracias por votar y siempre comentar aquello que les intriga :)

¡Los amo ❤ tanto!