Cap 26

524 32 6
                                    

Maratón 3/10

  -No no no no- me aparté alarmada.
-¿Qué pasa?- dijo Freddy preocupado.
-No puedo, tengo que quitarme esto- me quité la venda. Freddy se volteó inmediatamente, yo solté 20 litros de baba al ver su cuerpo escultural en boxer.
-¡Janet! ¿A qué horas piensas bajar? Te estamos esperando- escuché que gritaba Mike en la puerta ¡M$#da m%$da m%$da! Me levanté inmediatamente.
-Ya bajo, me estoy canalizando las energías de Venus- me volvi a poner el brasier del disfraz.
-¿Has visto a Lí-Sellers?- preguntó. Yo miré hacia atrá y él permanecía de espaldas con la cabeza en las manos.
-¡No! ¿A-a-a-acaso yo duermo con él?
-No, pero siempre lo andas acechando.
-¡Yo no lo acecho! ¡Lárgate que me estoy vistiendo!- dije nerviosa.
-Noa y yo estaremos en el auto, apresúrense- escuché que se fue...¡Espera! ¿Acaso digo...'Apresúrense'? ¿En plural?
-Vístete- tomó su ropa y entró al baño. Justo cuando cerró la puerta me dejé caer en la cama y di un suspiro de perdedora total. Janet ¿Por qué no te lo fajaste? Comencé a levantary dejar caer mi cabeza sobre el colchón. Janet, eres una maricona decía mi sicópata. Mientras el ángelito apareció Nunca debiste haber comenzado con esto decía inconforme. Pensé que sólo habían pasado segundos cuando la puerta se abrió, yo seguía de diabla. Me senté en la cama inmediatamente para apreciar aquél hombre hermoso acomodando sus pantalones. Por favor, mira nada más que hombre, niñita novata. Yo, inundando mi habitación de baba. Freddy alzó la mirada y la bajó inmediatamente con una sonrisa tímida ¡Por favor! ¡Este hombre me incita ponérmele de rodillas y cantarle un hinmo!
-Hola- susurré. ¿Hola? ¿Qué más pude decirle?
-Hola- murmuró suavemente mirando mi cuerpo. Me levanté y me acerqué a él instintivamente. Él miró hacia el suelo al igual que yo. Me tomó de la cintura y me aferró a su cuerpo envolviéndome en un abrazo. Sentí como todo mi cuerpo se relajó en sus brazos...pero ¿Por qué me abrazaba? No me importa, sólo sigue haciéndolo. Sentí sus labios presionando los míos, los mantuvo presionados unos segundos. Todo era tan malditamente intenso, luego de unos segundos me soltó- Te espero abajo- salió.
Yo solté mi respiración contenida y me lancé al suelo ¿Qué te pasa, Janet? ¿Tan mal te pone? Levántate y haz como si nada pasó...¿Qué? ¿Cómo si nada paso? Me levanté y me puse la ropa, terminé mis maletas y salí de la habitación, cuando las bajé Mike me ayudó a subirlas a la cajuela. Mikw me abrió la puerta trasera.
-Janet- me llamó Freddy-...adelante- Mike entró en el auto y yo entré al asiento del copiloto. Arrancó.
No pasó media hora cuando Mik y Noa ya iban tirando risitas tontas y sonidos se bocas, me ponían al borde.
-¿Podrían dejar de estarse succionando? Parecen aspiradoras- ordené sin paciencia.
-Mira Janet, tú no eres mi madre para ordenarme nada ¿Bien?- murmuró Mik.
-Mik, cálmate- dijo Noa paciente.
-Mira, igualado. Yo no seré tu madre gracias al cielo pero no tengo porque estar presenciando sonidos ni imágenes de babeos. Así que paran ya ¡Estoy harta!- me volví a recostar en mi asiento.
-¡Basta! No son niños ¡Compórtense!- ordenó Freddy. ¿Compórtense? Como te comportaste tú con la diablita.
Ni Mike ni Noa emitieron una palabra y luego de una hora se quedaron dormidos. Y sí, recostados uno al otro. Mi psicópata estaba molesta.
-¿Tú no tienes sueño?- dijo Freddy con la vista en la carretera.
-Dormí suficiente mientras estaba drogada- puse mis pies sobre el frente.
-Baja los pies ¿Quieres?- Negué con la cabeza. Eso, así, Janet. No ha pasado nada. Este hombre no te perturba.
-Has estado callada, eso debe ser algún tipo de rércord- sonrió.
-¿Pretende que una este normal despues de lo que....
-¡Cállate!- ordenó. ¿Qué?
-¿Perdón?- lo miré.
-¿Enserio quieres hablar de eso con tu hermano fingiendo estar dormido para acurrucarse en el hombro de Noa?- me alzó las cejas.
-Mi hermano no está fingiendo estar dormido para acurrucarse con Noa, ambos están fingiéndose dormidos para poder tocarse sin que les diga nada- lo corregí.
-Mejoraste mis instintos.
-Ya lo sabía- reí victoriosa.
-Bueno chicos, en dos horas estaremos en Mánchester, allá no podrán mostrarse afecto de más en la casa, así que les dejaré aprovechar- presionó un botón y saltó una plancha que dividía en auto por completo.
-¿Qué está haciendo?- dije alarmada. A mi psicópata no le gustaba que Mike MI Mike se quedara solo por dos horas con Noa.
-Dándoles y dándonos privacidad- me sonrió, giró una perilla del volumen y esta comenzó a sonar  

Mala Janet Segunda Temporada De Niña MalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora