La mansión Santos

Capítulo 32: La vida continúa..

Muy temprano por la mañana a los tres chicos Santos mayores les tocaba la tarea de regar y atender a todas las flores del jardín trasero de la mansión, tenían una gran variedad de flores de varios colores pero ninguna blanca, lo cual era muy importante, ya que las flores blancas eran específicamente para funerales y entierros, y se relacionaban directamente con la muerte.

   -me toca ayudar con el desayuno hoy-le dijo Antonio a Lucios después de que el chico terminara su parte en el jardín-¿quieres que me quede a ayudarte?

   -no... es...estoy... bi... bien-era uno de esos días en los que a Lucios le costaba más de lo habitual comunicar sus palabras-puedes...-puedes irte, simplemente no conseguía que la palaba saliera de sus labios, aunque no había problemas con su primo, él lo entendía a la perfección.

   -bien, te veré en el desayuno

Lucios agitó la mano en forma de despedida y se quedó a terminar lo poco que le faltaba. Antes de terminar regó las Dalias, tenían un bonito color rosa que le hizo pensar en Jocelyn, pasaba todo el tiempo con una de las gemelas King (y con Alberto y Margot) y prácticamente todo lo agradable a la vista lo hacía pensar en ella.

Al finalizar la tarea cortó una flor y fue a buscarla.

Sabía que los chicos King se levantaban temprano pero no estaba seguro de dónde encontrarla, y lo único en lo que pudo pensar fue en dejarle la flor afuera de su cuarto y de alguna forma esperar que adivinara que fue él. Pero al subir las escaleras se la encontró, iba sin su hermana gemela, lo cual era muy extraño, y le gustaba tener aunque fuera un pequeño momento a solas con ella.

   -hola-lo saludó la chica sonriendo.

   -aaa...-pero Lucios no podía conseguir decirle que quería darle algo y lo que eso significaba-es...-le mostró la flor.

   -¿es para mí?-le preguntó sorprendida y el chico asintió en respuesta. Le tomó la mano a Jocelyn y le colocó la flor en ella-muchas gracias-notó que él aun no soltaba su mano y que veía como sus manos estaban juntas, supo que era su forma de decirle algo.

Se inclinó y ambos se besaron por primera vez.

   -realmente me gusta mucho-le dijo la chica King.

Después de eso Lucios se fue y la chica continuo su camino hasta la biblioteca donde la esperaba su hermana, seguía sonriendo y con la flor en sus manos cuando llegó al lado de su gemela.

   -¿Quién te la dio?-le preguntó ella.

   -Lucios, aunque creo que realmente era para ti.

Ambas se rieron, Lucios se había equivocado de hermana, fuer realmente Margot King la que estuvo con él en el pasillo.

   -¿te gusta?-le preguntó Jocelyn refiriéndose a la flor.

   -me encanta-respondió Margot dándosela.

   -quédatela.

   -pero era para ti.

   -tal vez, pero te la ha dado a ti.

   -¿no te molesta?

   -claro que no, lo mío siempre será tuyo también.

...

-¡¿es un Grimm?!-gritó Alberto después de que Claudia le explicara su conversación pasada con Bastian, con la llegada de los King y estar todo el tiempo con Yera no había tenido tiempo.

   -¡shhh!-lo calló su prima, estaban afuera de la biblioteca platicando, ya que adentro estaban todos los chicos King-aun nadie más lo sabe, eso es asunto de Bastian.