La caída del príncipe

La ira de Kylo Ren

Lo habían logrado, llegaron a la Isla Ahch-to y una vez que aterrizó la nave todas las tropas se dirigieron a diferentes cuevas a buscar a la Emperatriz Rey.

—Nosotros iremos en las naves, ya que desde arriba es más fácil la búsqueda. –dijo Finn

—Jamás creí decir esto, pero cuento con ustedes.

—Descuida Ren, la encontraremos sana y salva. –aseguró Poe poniendo una mano encima de su hombro

Así fue como el grupo de la Resistencia se dirigió a distintas naves para buscarla, pues la Isla era muy grande. Kylo empezó a rastrear la fuerza de Rey para ver si podía localizarla, sin embargo lo único que logró fue frustrarse más. En su enojó pateó una gran piedra que cayó en un montón de ellas destruidas. Ahí pudo ver una manta que por el tiempo estaba desgastada y restos de tronco que al parecer fueron para realizar una fogata.

Kylo se agachó para recoger la manta y al simple tacto sintió como si estuviese en un flashback, viendo la cueva antes de ser destruida y la fogata encendida. Y la vio a ella.

A Rey, ese mismo día en que ella se contactó con él, para contarle sus temores, para poder acercarse y conocer más de él. Ese día en el que tocaron sus manos por primera vez. Se veía tan hermosa a pesar de tener sus ropas mojadas, en ese momento él recordó cómo se sintió tocar su cálida mano. Ambos vieron su futuro y a pesar de que ellos creerían que las visiones fueron diferentes, pues fueron la misma.

Rey vio que Kylo regresaría a la luz y así fue, Ben Solo volvió para formar un balance en su persona como Ren. Él en cambio vio que ella estaría a su lado lo cual también sucedió, ella se convirtió en su esposa, emperatriz y amor de su vida.

Kylo empezó a recordar todos esos buenos momentos junto a Rey después de la guerra, cuando ella acepto ser su mujer, su primera noche, su boda.

Y también...

*Flashback*

—Amor, despierta...

—Rey, dime ¿qué sucede? –decía Kylo recién levantándose, sentado en su cama

—Primero que nada, no te enojes por favor, no sabía que pasaría.

Kylo abrió los ojos de golpe y empezó a asustarse, observó que Rey estaba temblando y pálida.

—Amor, no me enojaré, dime.

—Ben...creo que estoy embarazada –le confesó Rey mientras se le salían unas lágrimas de preocupación

Kylo se quedó atónito mirando a la nada mientras seguía sentado en la cama. Sentía una mezcla de sensaciones y ninguna de ellas era felicidad. Esta noticia a él lo hubiera animado y emocionado, pero ellos ya habían ido a consultar con un experto en este tema, alguien que le gustaba leer los libros Jedi. Rey moriría si llegase a estar embarazada por el hecho de que es hijo de dos portadores de la fuerza, sería demasiado para el cuerpo de ella, entonces por eso él empezó a alejarse de Rey, porque no quería caer en la tentación y cometer el error de por eso perderle. Rey empezó a deprimirse porque sentía su lejanía y Kylo no aguantaba verla de ese modo, entonces con el tiempo él fue olvidando lo que se prometió y le correspondió sexualmente a ella.