La caída del príncipe

El nuevo heredero

La batalla había empezado, Kylo era el único que atacaba mientras ella sólo se defendía.

-Vamos, atácame.

-No quiero hacerlo.

-Dijiste que me detendrías ¿no?

La nave se había arreglado lo suficiente como para partir de aquel lugar y tanto el maestro como la otra mujer estaban listos para despegar de ahí.

-Eso hago.

La nave partió sin Amelí y Kylo supo que el bebé era prioridad envés de perder el tiempo con ella. Ella solo estaba intentando quemar tiempo para dejar que escapen. Pero algo sucedió, la nave empezó a caer cómo si estuviese fallando. Evidentemente iba a explotar. La mujer por el temor abrió la salida de escape con el bebé en manos.

Kylo intentó acercarse lo más posible y traer al bebé usando la fuerza, sin embargo Amelí intento atacarlo por atrás. Los reflejos de Ren eran muy buenos y evadió el ataque empujándola con fuerza hacía atrás. De pronto vio algo que le causo terror la mujer tiró al bebé al mar y ella se tiró al igual. Kylo se concentró lo más posible para cogerlo con la fuerza antes de que su cuerpo toque el mar y lo logró, lo fue atrayendo de poco a poco hacia él. Era demasiado difícil, la distancia era mucha y se estaba cansando. Ya falta poco, muy poco. Hasta que a centímetros de él, pierde la fuerza y actúa rápido mientras cae protegiéndolo entre sus brazos. El bebé no dejaba de llorar, Kylo se sacó por completo su capa y lo cubrió. Escuchó la fuerte explosión de la nave, sólo el maestro había muerto dentro ahí, ya que la mujer se lanzó al mar. Sabía que algún día encontraría a esa mujer y la mataría. Regresó su mirada al bebé.

Lo quedó mirando y...

-Esos ojos, esos preciosos ojos almendrados de tu madre... Ya no llores, estamos a salvo. -decía mientras acurrucaba al niño.

El bebé se fue calmando de apoco e intentaba agarrar su cara.

Fue un momento especial para él. La primera vez que veía a su hijo.

-Ben...

Amelí al haber sido empujada con fuerza se golpeó contra una roca sangrando su cabeza. Kylo se acercó a ella pero su mirada no reflejaba compasión.

-Mátame, lo merezco.

-...

-Hazlo, te hice daño a ti, a tu esposa y a tu bebé.

Kylo alzó su sable encendido ante ella, mientras sostenía al bebé con su otro brazo. Amelí solo cerró los ojos y espero el momento.

-Desaparece para siempre de nuestras vidas. -le dijo él mientras apagó su sable y se iba.

La piedad de él hizo que Amelí coja fuerzas y se pare. Por un momento ella creyó que él aún sentía algo por ella.

-Ben, espera.

- ¿Hmm?

-Nosotros, nosotros aún podemos estar juntos. Huye de esa responsabilidad de ser el Líder Supremo, ven conmigo.

-Nunca hubo, hay, ni habrá un nosotros.

- ¿Y la Academia Jedi, y todos esos buenos recuerdos?

-No voy a perder el tiempo aquí debo ir a ver a mi mujer. Sólo quiero que sepas algo, para mí esos momentos ya no significan nada teniendo a Rey y a este bebé a mi lado.

-Creí que me querías...

-Te tenía aprecio, pero créeme que ahora solo deseo matarte.

Amelí sabía que pedía mucho de él y entonces desistió. Kylo partió con el bebé de regreso a la nave. Al parecer no había despegado, entonces eso significaba que la lograron estabilizar aquí.