Capitulo 4: Solo intento protegerte.

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La verdad, es que esta era una situación bastante incomoda. Ninguno sabia como había llegado acá. 

Mas o menos esta era la escena.

Louis y Zayn estaban sentados en el mismo sofá, no a mas de un metro de distancia, mientras Liam curaba el labio roto del ojiazul y Harry le atendía la ceja al moreno. Todos estaban reunidos en el apartamento del rizado. Los mas jóvenes se lanzaban miradas de miedo y trataban de no hacer mas obvio el terror que había en sus facciones. El Malik respiraba por la nariz en un vano intento de calmarse, mirando a todos lados menos al joven de su lado. Mientras Tommo tenia la mirada perdida y parecía estar en algún lugar de sus pensamientos, fue el mas fácil de arrastrar hasta el vehículo del rizado... y bueno, Zayn, actuó igual a su apodo, como una tormenta. Tuvo que ser casi cargado por Liam y sostenido de manos por Harry, el cual le rogaba que se detuviera.

Porque a fin de cuentas, nadie entendía cual fue la razón del arranque de Zayn. Tal vez Hazz pudiera tener una idea, pero no quería anticiparse, primero una respuesta y luego vería como calmar a la fiera.

-Zayn.- susurro el ojiverde buscando los ojos mieles de su amigo- Mírame.- continuo susurrando, no quería hacer un alboroto. Sabia que siquiera levantara un poco la voz, desataría una guerra interminable- Dime que te pasa, Z.

-Cállate mierda.- respondió entre dientes. Harry se tenso, esto iría muy mal.

-Por favor Zayn, dime que tienes.- volvió a pedirle. El estaba claro de que no lo debía presionar, pero, necesitaba respuestas.

-Joder Harry, cierra la maldita boca.- espeto levantándose de golpe. Ambos rostros se encontraban a centímetros, ninguno quería dar marcha atrás. El rizado no cedería ante su actitud infantil y Zayn, bueno, es la persona mas terca del mundo.

-Zayn, deja tus estupideces y dime.- un gruñido se escapo al final, odiaba llegar a los extremos pero si tendría que dar y recibir unos cuentos puñetazos, para que su mejor amigo dejara de ser el maldito bastardo que a veces es... lo haría, no perdería nada. De todos modos, no seria la primera vez.

-¿Por que coño te importa tanto esto?- su voz era similar al rugido de un león.

-Porque no puedes ir atacando a quien se te da la gana, solo porque quieras Zayn.- susurro con suavidad, posando sus grandes manos en las mejillas del morocho, dejando que sus pulgares acariciaran suavemente la tersa piel.

-Es solo... no pude con todo.- bajo su tono y dirigió su mirada al suelo. No había cosa que lo hiciera sentir mas culpable, que cuando lo miraba de esa manera.

-Lo se.- un suspiro se escapo de sus labios, como lo imagino había sido eso- Debes pedirle disculpas.- sentencio, soltándolo con suavidad y ahora mirando al chico que aun estaba perdido en su mundo.

-Harry.- murmuro por primera vez en todo el rato el castaño. Sus ojos estaban muy abiertos- No creo que sea...

-Liam, tranquilo.- pidió lentamente.

-Si, tranquilo “Liam“, no le haré nada a tu amiguito.- interrumpió de la nada Zayn, enfatizando su nombre. El susodicho se tenso, no le agradaba para nada el tono que había usado. 

-Zayn...- reprocho de nuevo el rizado.

-Coño, no he dicho nada.- se excuso alzando ambas manos- Solo le digo que se calme, así que deja de ser una perra Styles.- comento tranquilo, moviendo la mano en un deje de no me importa una mierda.

-Cuida tus palabras, solo esta tratando de ayudarte.- Liam dio un paso al frente, ahora siendo él el que encaraba al Malik. Zayn casi ríe ante ese acto, pocas personas habían intentado eso alguna vez y casi siempre salían muy mal de esa situación.

Little Things »EDITANDO«Where stories live. Discover now