Obra concentrada particularmente en Sirius Black.
Hay que retroceder un poco, un año antes de Hogwarts. Cuando había oscuridad, pero Sirius apenas comenzaba a verla. Tendría ansias por salir.
(Todos los espacios en blanco de Sirius Black finalmente...
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Sirius era una bomba, siempre lo había sido, solo era cuestión de tiempo para que estallara y todo lo que alguna vez había sido se hiciera polvo. Que la cuenta regresiva comience.
Retrocedamos un año antes de Hogwarts, cuando se formó una grieta en la paz del #12 de Grimmauld Place y Sirius, atraído por la luz, no se negó a acercarse un poco. Y cada vez más.
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Sirius es diferente, se encargaron de hacérselo saber. Quizá fue el miedo y no la valentía el que lo llevó a Gryffindor. Su rostro comenzaría a iluminarse por las infinitas posibilidades. Por toda la magia.
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La oscuridad de su familia es innegable, que no haya sido seleccionado como todos sus ancestros no significa que esté exento de la oscuridad, mucho menos de su familia, y a lo mejor era eso lo que necesitaba para darse cuenta dónde quería estar.