(P.O.V)__________(Tn)
Dejamos el helado sobre la mesa y yo coloqué en una bolsa los riñones para luego guardarlos en el refrigerador. Liu encendió un estéreo con música baja y hablando de idioteces comimos el helado. Eso era algo que nunca había disfrutado así. Era ya muy tarde.
-¿A donde fue Gabe?-Yo iba a preguntar lo mismo, pero el ojiverde se me adelantó.
-Debía trabajar. De seguro volverá-Hizo una pausa, pensante-Más tarde.-Finalizó. Bloodie me entregó unos mantas para dormir en el sofá. Insistieron demasiado en que duerma en una de sus camas, pero por alguna razón, me gustaba más la idea de dormir en ese comodísimo sofá. Cuando ya todos se acostaron yo aún daba vueltas. Observaba el techo. Miraba el cielo nocturno a través de las ventanas. Intentaba dormir, nada funcionaba. Cuando estaba dándome por vencida, la puerta de entrada se abrió mostrando a Gabe, aunque no podía verlo bien debido a la falta de luz. Me divisó y se acercó a mí. Me senté en mi lugar y lo observé con curiosidad. Tomó mi rostro y me obligó a mirarlo a los ojos.
-Si aún no te entregué a mis compañeros es porque ellos te quieren. Pero si llegara a encontrarte sin su protección, le daré tu cabeza al operador. -Se alejó. Lo tomé del puño de su sudadera. Ya lo había reconocido.
-¿Has... visto a Toby últimamente?-Asintió.-¿Como ha estado?¿Ha dicho algo sobre mí?
-Más que cosas sobre encontrarte y aniquilarte, no. ¿Se conocían?-Quizás eso me respondió todas las dudas que tenía respecto a lo que era nuestra corta relación. Por fin podía no sentir remordimiento por besarme con el hermano de Jeff.-Tu rostro me responde. Aunque no creo que le importaras mucho si el mismo nos afirmó que te había matado.-Volví a recostarme en mi lugar tapando mi cuerpo con las mantas. El entendió que debía irse y eso hizo. Seguía intentando dormir pero no lo conseguía. Finalmente me decidí y entré la que debía ser la habitación de Liu. Me acerqué a su cama y su rostro se veía muy pálido iluminado por la luna. Me metí bajo las sábanas y lo abrazé. Él abrió levemente los ojos y al ver que era yo sonrió un poco. Me dio un corto beso y me abrazó de regreso. Ya mas relajada logré dormirme, pero en el fondo me sentía inquieta.
Ya era pasado el mediodía y estaba preparando la mesa, decidí cocinar yo puesto que habían sido muy hospitalarios conmigo. Hice pasta con una salsa de quesos. Serví zumo en los vasos y los llamé a comer. Bloody acababa de levantarse, Gabe habia despertado a la mañana pero había desayunado solo y Liu se había despertado junto conmigo. Comimos en silencio, luego los chicos fueron a ducharse y Bloody comenzó a recoger la mesa junto conmigo.
-No estabas en el sofá esta mañana _______(Tn)-Comenzó interrogante.
-¿Estabas despierto?-Indagué colocando la vajilla en el fregadero.
-Me desperté con el olor del café que había preparado Gabe, y cuando iba a despertarte no estabas ahí. -Me observó, intentando encontrar pistas en mi vestimenta o rostro. Pareció rendirse luego de unos segundos.-¿Por qué acudiste a Liu cuando podías ir conmigo? Sabes que podríamos haber hablado y quitarte el miedo.-Habló secando los platos que le estaba entregando.
-Supongo que solo necesitaba alguna compañía, es muy inquietante la presencia de un proxy mientras duermes, más en mi situación.-Excusé retirándome al sofá. No tardó en seguirme.
-Él no dirá nada pero lo mejor sería que se lleven bien, solo por asegurarnos.
-No sé si sea posible, no cuando ve a Tobías todo los días y sirve a slenderman. No puedo soportar que me hablen de él pero tampoco resisto interrogarlo. Ya no lo amo, Helen. Pero necesito saber de el, poder hablarle.-Confesé hundiendo mi rostro en mis rodillas. Él acarició mi cabello, comprendiéndome.
-No se que ha pasado con el, pero ahora mismo nadie lo reconoce. Si algún día vuelve a ser el de antes, entonces todos estaremos juntos de nuevo. Podrás hablar con él o regresar juntos. Pero asta entonces, no quiero que te acerques a él, porque te matará sin remordimientos.-Asentí mirándolo. Tenía razón. Y yo no tenía mis poderes para defenderme como antes, estaba desentrenada mientras el estuvo todo este tiempo luchando y entrenando, podría darle pelea, pero no estaba segura de poder ganarle sin peligrar.
-Esta noche saldremos a cazar. No quiero permanecer débil. Me haré más fuerte para cuando el momento llegue.-Afirmé, mientras el me observaba con una sonrisa, luego prosiguió a abrazarme. Hablamos toda la tarde y miramos algunas películas. Luego, cayó la noche y con ella mi hora de volver.
-Espera a que se vaya Gabe, no quiero que sepa tu ubicación.-Ordeno entre susurros Liu conmigo sobre su regazo. Me tenía apresada con sus brazos y no me dejaba ir. Bloody estaba en su habitación y Gabe igual. Estábamos solos.
-Se enojarán, debía volver hace horas.-Murmuré con fastidio fingido.
-¿Estás segura?-Dijo sobre mi labios, estaba tan cerca que podía sentir su respiración. Los unió con suavidad para luego moverlos de una forma mas intensa. Le seguí el beso, sabía jodidamente bien. Sus manos trepaban por mi espalda ocasionándome escalofríos. Bajé con húmedos besos hacia su cuello agradeciendo que no tuviera su bufanda ni abrigo. Sentía el calor subiendo por mi cuerpo cuando sus manos bajaron por mi espalda y sus manos aprisionaron mi trasero. Regresé con prisa a sus labios, no quería que ningún sonido saliera de mi boca. De pronto una sonrisa regresó a mis pensamientos, junto a su cicatriz a un lado de esta. No pude más y me separé. Liu me miraba sonriendo como idiota.
-¿Por que me miras así?-Murmuré moviendo mi vista de su rostro.
-Llevo tanto tiempo deseándote así, que tenerte sobre mi y besándome se siente como un sueño.-Hundió su rostro en mi cuello, aspirando mi aroma-Ardía cuando Toby podía tocarte como el quisiera, podía amarte-Confesó. La sola mención de su nombre hizo que me separase de el con horror.-Lo siento, no debí mencionarlo. Se disculpó poniéndose de pie y siguiéndome al sofá.
-No, no debiste-Hice una pausa para respirar mejor.-Pero ya debo dejarlo ir, no se merece que siquiera piense en él cuando soy libre de decidir.-Me miró sin entender y sin aviso pegué sus labios a los míos, a lo cual respondió con total necesidad. Poco a poco fuimos cayendo al cómodo sofá y una de sus manos jugaba con mi abdomen bajo mi blusa, queriendo adentrarse mas allá. Sus piernas encajaban a la perfección con las mías. De pronto su mano bajo por mi espalda y presionándome por el muslo logró que nuestra intimidades se tocasen, demostrándome la reacción de su cuerpo a mí. Reprimí un gemido al contacto y ahí supe que debía separarnos. No podía,no aún, no con él. Lo separé regalándole besos dulces y así comprendió que no quería llegar a más. Me senté en el sofá con las piernas sobre él, esperando mi oportunidad para volver a la casa.
Luego de unos minutos vimos a Gabe marcharse, no sin antes darnos una ultima mirada furtiva. En ese momento apareció Bloody y me dijo que me acompañaría a la casa. En el camino sentía incomodidad, como si alguien nos observase. Miré a mi acompañante y asintió. Me dio una señal y comenzamos a correr. Esto me costaba, dado el tiempo que estuve inconsciente, tomó mi mano apurándome el paso hacia la casa, ya casi llegábamos, cuando un dolor agudo se instaló en mi hombro haciéndome parar y soltar una exclamación. Toqué mi hombro buscando el origen hasta que sentí el puñal de un cuchillo, sin planteármelo e ignorando el dolor lo arranqué. No vi sangre en la daga, y eso me aterró.
-Imbéciles, acaban de darme un arma-Pensé. Mire hacia todas direcciones sabiendo que no podría huir. Ahí a nuestra derecha visualicé a la persona que hacia tiempo rondaba en mi mente día y noche, sosteniendo sus hachas y riendo. En el tejado frente a este estaba Hoodie con su arma y detrás nuestro Masky, a punto de lanzar otra daga. Bloodie sacó su cuchillo, estaba claro que la lucha era inevitable.
-Entrégala y serás perdonado por hoy Otis.-Ordenó Hoodie apuntándolo.
-Supongo que no quiero ser perdonado.-Espetó con una sonrisa burlona.
