#12

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Habían pasado ya cuatro días desde la fiesta y aún seguía sin saber nada sobre Yoongi. La depresión me aumentaba cada vez que despertaba y notaba que se agregaba un día más a la espera de volver a verlo. Era ya cerca de mitad de tarde y Hoseok estaba preparándose para ir donde Namjoon.

- No sé qué te esté pasando, Jimin, pero yo creo que no lo resolverás desde la cama. -dijo mi hermano mientras salía de la habitación con un cambio de ropa en sus brazos.- Me iré a dar un baño, tú haz algo con tu vida.

Solté un suspiro de resignación mientras observaba cómo se cerraba la puerta. ¿Cómo podría resolver esto si ni siquiera sabía dónde vivía Yoongi? Lo único que se me ocurrió en el momento, fue ir a esa pequeña plaza donde lo vi en el columpio.
Me levanté rápidamente y comencé a buscar ropa decente, ya que llevaba en boxers desde la mañana luego de la ducha.
Elegí una remera negra junto con unos jeans y converse. Tomé un gorro de lana blanco y un buzo del mismo color, estaba fresco el clima y tal vez bajaría más la temperatura, además, no sabía cuánto iba a quedarme allí.
Fui hacia el baño y golpee la puerta para avisarle a Hoseok.

- Saldré un rato...

- Ya era hora, avísame por mensaje si vienes a comer. -respondió desde adentro.

- Lo haré, saludos a Namjoon.

Tomé las llaves de la canasta una vez que ya había llegado a la puerta y salí del departamento. Cerré nuevamente y me dispuse a abrigarme, ya que hacía más frío del que imaginaba.
Caminé hasta la dicha plaza y sentí crujir mi pecho al notar que estaba vacía, ni siquiera sabía por qué esperaba lo contrario si era sabido que esperaría. Y así fue, esperé allí hasta que el Sol se ocultó. Crucé de calle para comprar un refresco en el almacén y luego volver, estuve aproximadamente dos horas más y nadie aparecía, los negocios comenzaban a cerrar y decidí regresar.
Me levanté del columpio donde me había hamacado las últimas horas, metí las manos en mis bolsillos y comencé camino. Durante todo el trayecto, sentía cómo mis ojos se nublaban cada vez más, y hacía fuerza para retener las lágrimas en ellos.
Llegué a mi casa y encontré a Hoseok levantando la mesa donde cenó rato antes, se sorprendió al verme.

- Uh? Creí que ya no vendrías. -preguntó girando para llevar el plato al lavabo.

- Por qué no lo haría?  -respondí mientras me acercaba a la mesa para comenzar a jugar con mi dedo índice sobre el mantel mientras observaba los circulos invisibles que hacía con ellos.

- No lo sé... Tal vez encontraste al motivo de tu depresión y... -regreso y dejó de hablar al momento en el que se frenó frente a mi mientras observaba mis actos.- Oh... Jiminnie...-susurró mientras estiraba sus brazos para darle paso al abrazo que necesitaba tanto.

- Soy un imbécil, Hyung. - dije entre lágrimas mientras tapaba mi rostro y me envolvía en sus brazos.- Lo esperé todo el día y no hubo rastro, no sé qué me hizo creer que estaría ahí esperando mis disculpas.

- Nunca es tan fácil, pero al menos diste un paso. Ya volverás a encontrarlo y hablarán las cosas... -apretó suavemente y luego se alejó un poco para verme el rostro.- Jiminnie... No te ha dado su dirección ni número de celular?

- No, Hyung. -entre sollozos.

- Es muy extraño ese chico... - acarició mi mejilla mientras secaba una de las lágrimas que corría por ella.- No podías buscar alguien más fácil, verdad?

Sonreí, con la esperanza de que con mi mirada ya supiera la respuesta, que era no. Quería expresarle mediante mis ojos, lo mucho que necesitaba ver a Yoongi.

Al acostarme, antes de cerrar los ojos, me propuse como meta desde hoy, no faltar un solo día a aquella plaza hasta encontrarlo. No me daría por vencido, no con Yoongi.

Only You - •Yoonmin•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora