(Inma)
Cerré la puerta tras de mi cuando Isaza se fue. Sonreí y no sabía si era por la emoción de volver a verle o por nuestra charla. Quizá una mezcla de ambas. Tanto su mensaje como la actitud que había tenido me aclararon muchas cosas, pero esta vez era mejor ir despacio y reconozco que quería dejarme rogar un poco. No piensen mal, no por hacer sufrir a Isaza, sino porque merecía que él se deshiciera de ese orgullo de macho colombiano y porque he de admitir que me mataba la curiosidad de saber que planeaba esa cabecita suya.
Volví al salón y vi un sobre encima de la mesa. Isaza debía haberlo dejado allí antes de salir. Llevaba mi nombre escrito y lo abrí. dentro había un par de entradas para un evento al que los chicos asistirían con otros cantantes latinos, y juntos a ellas una pequeña carta.
'Quizá esperes una de esas cartas románticas, pero siento desilusionarte, no lo es. Solo te dejo esto porque me gustaría que asistieras a ese evento. Tengo reservada tu entrada desde hace algunas semanas, antes de que...bueno de que la cagara, y aunque sé que quizá no merezco que vayas por mí, me encantaría verte allí, y más si decides ponerte los labios de ese color tan tuyo que sabes que me vuelve loco y que realza aun más esa preciosa sonrisa.
Como ves hay dos entradas, y es que deberías llevar a Sue contigo, Villa necesita verla y explicarle muchas cosas. Y sé, tan bien como tú, que Sue merece saber toda la verdad.
Fdo. Un imbécil que no piensa dejarte escapar'.
'¿Y cómo convenzo yo a Sue?' pensé 'con lo mal que se me da mentir, seguro me pilla'. Pero él tenía razón, Sue no dejaba de preguntarse que era lo que había hecho mal, no entendía de un momento a otro su relación, con quien consideraba el chico de sus sueños, se viera estancada así que debía ingeniármelas bien para llevarla allí.
Me tire toda una semana para convencer a mi prima para que me acompañara a aquel evento. Fui costoso hacerle creer que Morat no estaría allí porque era el grupo en auge en Colombia y era raro que no asistieran algo de tal magnitud, pero utilice todas las argucias que se me ocurrieron. Eli había rehusado a ayudarme, estaba en modo hater con Villamil, peor por suerte contaba con la dulce Aleja, que aun creía en el amor que Sue y Villa se tenían. Así que ella fue mi cómplice.
-No sé que ponerme- dijo Sue entrando a mi cuarto aun con la toalla puesta
-¿Por qué no te pruebas algo de mi armario?- sugerí
-Bueno, tu vestido blanco - se hizo la tonta- podrías prestarmelo
-Todo tuyo - dije- de hecho te lo puedes quedar, nunca he usado ese vestido, no sé ni porque lo compré
Salió corriendo a su cuarto a ponérselo y yo seguí con mi intento de ondular mi pelo. Opté por hacer algo más notorio mi maquillaje aplicando una sombra negra en lugar de la marroncita que solía ponerme y por supuesto use el pintalabios que Isaza me había pedido. Un tono burdeos bastante oscuro. Me probé varios vestidos y acabé eligiendo el más sencillo. Uno negro ajustado con un escote bastante llamativo, al que acompañe con una americana del color de mis labios. Me coloqué unos taconazos que acabarían matándome a lo largo de la noche y lista.
-Porque somos primas, sino te pedía matrimonio- bromeó Sue
-Ser primas no es un impedimento - le guiñé un ojo

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¿Quién te dijo esa mentira?
FanfictionAl final del camino siempre encuentras a esa persona capaz de reparar un corazón tan roto que parecía no tener arreglo. Sabe exactamente que hacer, o decir para cicatrizar esas heridas que no cerraban. Por que a veces tenemos que rompernos, para q...