Juntos.

Azules.

Narra Sasuke.

Soy un idiota, ¿cómo no me enteré antes?, ¿cómo no me di cuenta?. Bueno, tampoco es como que me importara, ¿verdad?.

Me lanzo sobre mi cama y miro el techo de mi habitación. Él no me importa, me siento en la cama, él no es nada para mí.

¿A quién intento engañar?, Naruto me tienes confundido, sólo iba a ser una vez y ya, pero sólo una vez fue suficiente para volverme adicto a él. Ya me había acostado con varias mujeres con hermosos cuerpos, pero Naruto, Naruto fue diferente.

Su cuerpo delgado debajo mío, sentía que lo iba a romper, nunca fui tan delicado con nadie. Su piel bronceada, sus ojos azules, sus rayas en sus mejillas, su cabello rubio y sus labios, he tenido sexo con él, pero nunca lo he besado, pero ganas nunca me faltaron. ¡¿QUÉ ME ESTÁ PASANDO!?, yo no soy gay, yo hice eso solamente para experimentar.... Entonces... ¿Por qué lo hice más de veinte veces con la misma persona?, ¿sentiré algo por él?.

— Itachi volvió, quiere que bajes a saludar —. Dice Sasuki, me vale tres cajas de huevo.

Me levanto de la cama y bajo a saludar. Si no bajo yo Itachi sube, y no quiero verlo en mi habitación.

— Sí que has crecido mucho, hermanito —. le dice Itachi a Sasuki.
— Y no sólo de altura —. Ruedo los ojos, Itachi me mira y sonríe.
— Ahora es mucho más fácil diferenciarlos, ¿cómo estás Sasuke? —. Sasuki y yo somos hermanos gemelos nacidos en días diferentes, aun así siempre se festejan nuestros cumpleaños juntos, cuando eramos niños a las persona les costaba mucho diferenciarnos, pero ahora es un poco mas fácil. Sasuki tiene una novia llamada Sakura, tiene cuerpo de tabla de surf, y una actitud asquerosa, Sasuki se viste de forma llamativa y su actitud es pedante. En el instituto nadie sabe que tengo un hermano gemelo, ya que casi no hablo con nadie. Sasuki y yo entramos en institutos diferentes.

—No me quejo —. Me cruzo de brazos. — Mañana traeré a alguien a casa, no quiero verte cerca ni a tí, ni a tu tabla —. Le digo a Sasuki.

— Que agua fiestas, tendré que ir a surfear mañana a un motel —. Ruedo los ojos, siempre dice eso cuando se va a ir a cogerla. Subo las escaleras, llego a mi habitación y cierro la puerta con seguro.

Me lanzo a mi cama, y pongo mi brazo sobre mis ojos. Itachi siempre hizo preferencia, los cumpleaños siempre se festejaban en el día del nacimiento de Sasuki, para Itachi y mi padre Sasuki era el mejor hijo, el mejor hermano, el mejor en los estudios, el mejor en esto, el mejor en los otro, gracias a eso tiene ese ego... Mi madre era la única que me felicitaba en el día de mis cumpleaños, la que me daba regalos, la que me consentía, la que realmente me amaba, Te extraño mucho mamá.

Me siento solo.

Ayer a la noche no pude tener acción, la muy estúpida no quiso coger en un motel, como sí la muy puta mereciera algo mejor. Hoy no tenía ganas de preparar mi almuerzo así que tendré que ir a la cafetería a comparar mi almuerzo.

Que lugar más asqueroso, hay mucho ruido. Después de esperar una eternidad en la fila, al fin, es mi turno. Decido ir a comer en la terraza, me dirijo a la salida cuando siento una mirada diferente a las otras, seguro es otra puta que quiere que se la coman.

Había pasado una semana y esa semana me pase buscando a la tipa esa que me miraba, todos los días iba pero hay muchas chicas que me comen con la mirada pero la mirada que siento es diferente, ¿De quién podrá ser?.

— ¡Fíjate idiota! — estoy en la fila de la cafetería, me giro, para ver quién fue la que gritó, y veo a la tabla de mi hermano. Sí que es plana y con esa frentesota, esta tratando de limpiarse su ropa, escucho como un chico le pide perdón no puedo verle la cara, lo único que puedo ver es su cabello, Es muy hermoso, ¿qué estoy pensando?.

Había pasado una semana desde el accidente, había ido toda esa semana a la cafetería buscando a la chica que me miraba, pero extrañamente ya no sentía esa mirada. El chico de cabello rubio tampoco había aparecido.

Había pasado una semana más, ya me estaba aburriendo, no sentía más la mirada, hoy sería el último día que vendría a la cafetería, me aburro con facilidad. Siento que alguien me mira y empiezo a buscar a la chica, ¿por qué me interesa tanto encontrar a esta chica?.

La mirada que siento se desvanece, hay varias mujeres que me miran, busco y busco pero no la encuentro. Faltan dos personas más, siento la mirada, me giro y se desvanece. Busco a la chica, pero me detengo, el chico rubio, esta hablando con un chico de tés blanca y cabello color marrón. 

Puedo ver su rostro, tiene rayas en sus mejillas, su rostro es pequeño, tiene facciones finas, tiene la tes bronceada, pero no alcanzo a ver el color de sus ojos.

— Es su turno —. Dice la que atiende, asiento y pido. Lo lamento por la chica, me cansé de buscar y ya no quiero volver aquí.

Me miran, me giro y no se ¿por qué razón? mire al chico rubio, él... Él es el que me estaba mirando...

Su mirada... Es él... Tiene los ojos azules.

Me despierto y, automáticamente, me siento en el borde de la cama, tengo la respiración agitada, ¿por qué soñé eso?, ¿por qué?. Esa fue la primera vez que vi a Naruto, ¿desde ese entonces ya me llamó la atención?, ¿desde ese entonces siempre fue así de lindo?.

— Naruto —, susurro. — quiero verte — ¿que me esta pasando?.

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Hola señoras, señores, señoritas y señoritos.... Se que tarde muchísimo en actualizar, realmente estaba muy ocupada, el capítulo es re corto pero para no hacerles esperar, más, de lo que ya esperaron, les traigo este capítulo. Espero que lo disfruten.

Quiero que comenten aquí... ¿Que color de ojos tienen?, así voy conociendo más a mis lectores.

Y eso es todo, nos vemos en el siguiente capítulo.

Atte. Una fujoshi muy atrasada con las actualizaciones.