Kenny El Gurú Del Amor

13K 1.1K 2.7K
                                    

Si Kenny quería lograr salir de la temida y dolorosa friendzone debía poner manos a la obra y rápido.

El único problema es que Kenny no sabía un carajo sobre relaciones, al menos no de las serías y formales porque a esas las evitaba como la plaga.

Después de todo Kenny ya había comprobado por carne propia lo peligrosa que podía ser la monogamia, siendo que su primera novia lo mató con una ETS y la más reciente lo atravesó con una motosierra cuando le puso los cuernos (lo cual fue totalmente exagerado de su parte, no era culpa de Kenny que el hermano de esta estuviera más bueno y la chupara mejor ¡Es culpa de la genética!).

Hace un buen tiempo que renunció a todo ese lío, después de todo siempre pensó que había mucho Mccormick para amar y ni por una mujer con tres pechos sentaría cabeza.

Bueno, así era hasta que su conejito entró a su vida. Nunca había estado en tan poco control de sus sentimientos, tan dispuesto a querer cambiar, a querer ser mejor, por alguien. Ya no cabía duda para él que Butters lo había arruinado para cualquier otra persona de forma permanente. Dudaba que alguien pudiera dar vuelta su mundo y todo de lo que creía estar seguro como lo había hecho el rubio.

Haría todo lo posible por lograr conseguir el afecto de su niño y alejarlo de las garras de la bruja canadiense, pero para ello necesitaría toda la ayuda posible, porque tal y como estaba ahora ni todos los vientecitos mamones de la Rosa de Guadalupe lograrían ayudarlo.

Pero era más fácil decirlo que hacerlo, la realidad es que no tenía idea de por donde empezar la lucha por el corazón de su amado.

¿Y ahora quien podrá ayudarlo?

Bueno, quien sabe, la ayuda puede venir de los lugares más inesperados. Tal vez el idiota semi desnudo cantando en la fuente tenga algún buen consejo amoroso que entregarle.

Wait. Paren la narrativa un momento. Kenny conoce a ese idiota semi desnudo.

—¿Mphé mpharajo? —justo bajo el chorro de la fuente se encontraba Stan, bañándose de lo más tranquilo como si estuviera en su propia ducha.

Y YO ESTOY AQUÍ, BORACHO Y LOCO~ —tarareó Stan mientras hacía un par de saltitos en la fuente y lanzaba una botella de licor en el aire, la que terminó cayendo sobre la chamarra de Kenny arruinandola por completo. Aunque pudo haber sido peor, al menos no le cayó en la cabeza y le mató o algo por el estilo, lo que habría sido una pena pues todavía no era ni medio día y quería sacarle a este más provecho antes de morir de una manera ridícula.

Mientras se deshacía de su chamarra, no pudo evitar preguntarse cuando demonios había empezado Stan a beber de nuevo. Es verdad que Stan también había sido un poco olvidado con todo el lío de las últimas temporadas (y a la mierda la cuarta pared, todos saben que es la verdad), pero Kenny nunca pensó que sería tanto como para caer en el vicio de nuevo.

Hasta donde tenía entendido Kyle siempre había cuidado que este no rompiera su racha de sobriedad, sacando sus instintos de madre leona ante cualquiera que osara ofrecerle un trago al muchacho. Debía ser agotador hacer de niñera con el pelinegro, pero a Kyle nunca pareció importarle hacer tal esfuerzo, pues ante todo Stan era su super mejor amigo por siempre.

¿No es así?

—Pssss, Kenny ¡Mi buen amigo! ¿Qué te trae a mi humilde morada? —hasta que nota mi presencia, pensó Kenny rodando los ojos. Está bien que haya sido un poco invisible últimamente, pero no era para tanto.

1000 Maneras De Morir (Por Él) ~>Bunny<~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora