Dip Es Canon

6.1K 507 1.3K
                                    

—¡ES HOY, ES HOY! —Kenny no podía parar de dar vueltas en su habitación, tendría que salir pronto de la choza a la que llamaba hogar si quería ser el primero en llegar al show, pero aún no lograba decidir entre qué traje de porrista usar para la ocasión.

El de los brillitos tenía estilo, pero el de la minifalda desviaba la atención a... eh, sus mejores atributos.

Y si Kenny de verdad iba en serio, necesitaba toda la ayuda posible para destacar en el modesto público que decidía asistir, por alguna razón, a un concurso de baile promedio en un pueblo de segunda.

Hoy era un día especial para su conejito, y todo lo que importaba para su niño se convertía en primordial para Kenny automáticamente. Por tanto no podía ir vestido con algo menos que fabuloso, algo tan espectacular que sería capaz de quitarle su esquina a las divinas.

Porque sip, después de un largo período de autoexilio Butters estaba dispuesto a darle una tercera oportunidad al mundo del baile. Y no es como si le hiciera daño a nadie con ello, excepto por la vez anterior que bailó, y la anterior a ella... Pero Kenny tenía un buen presentimiento en esta ocasión.

Para la persona que no tenga idea de que carajo esta hablando Kenny, es porque no conoce el historial completo del Stotch, y siendo así, Kenny tendrá que pedirte seriamente que salgas de su burdel gay, porque en esta casa se ama a Butters y se sabe cada detalle de este, porque si no, hay tabla (y no de la forma sexy).

A decir verdad al McCormick le valía si Butters terminaba matando por accidente a una persona o dos con tal de ver su carita sonriente al subir al escenario. Carajo, Butters podría lanzar sus lustrados zapatos y enterrarselos en donde a Kenny no le brilla el sol, y él hasta estaría bien con ello, todo con tal de que siguiera haciendo lo que le hace feliz.

El rubio sabe perfectamente bien que era un simp máximo del pequeño, pero que puede decir, Butters lo había volteado de zorra a monogamo más fuerte que tazo en recreo de los 2000.

Decidiendo entre la opción más fabulosa de su guardarropas, la que estaba seguro que su poderosisima Miranda Priestly aprobaría, estaba listo para llegar de los primeros al salón comunitario de South Park, cuando vio las pequeñas gotas que empezaban a caer del cielo.

La otra noche te esperé bajo la lluvia dos horas... —empezó a tararear, sin dejar que el meado de Dios le arruinara el día. Era temprano y está sería la oportunidad perfecta para usar el paraguas que le regaló su chico, la primera vez que fueron juntos a saltar charcos en el parque después de un largo día lluvioso.

Aún recuerda como Butters fingió olvidarlo en casa de Kenny al irlo a dejar, ya que el pequeño chico no había logrado convencer al inmortal de que, sí, el Stotch efectivamente tenía otro en casa, y no le hacía falta otro de sobra, que quería evitar que Kenny agarrara un resfriado al no tener como salir sin empaparse.

A su niño lo habían castigado un mes entero por "perderlo", y Kenny no pudo evitar sentirse mal por ello, a pesar de que el gesto del Stotch lo dejó sintiéndose todo suave y calentito por dentro durante semanas.

Aún perdido en sus recuerdo Kenny comenzó a subir por la escalera a su segundo piso/techo a recoger su preciado paraguas, justo en el escondite secreto donde guardaba todo lo importante, junto a las pinturas a dedo que le regalaba Karen y su primera Playboy.

—Y CUANDO LLEGASTE ME MIRASTE Y ME DIJISTE LOCO —subió rápidamente por la vieja escalera hasta su escondite, elevando el tono de su voz a medida que se iba emocionando con esta.

— ESTAS MOJADO —ya con el paraguas en mano, el cual venía con una punta convenientemente puntiaguda (ya saben, en caso de que fuera necesaria como autodefensa ante un Bryan salvaje), empezó su bajada por la decrepita escalera— YA NO TE QUIEROOOOOOAGHCARAJODKSJSJ.

1000 Maneras De Morir (Por Él) ~>Bunny<~Where stories live. Discover now