1000 Maneras De Morir (Por Él) ~>Bunny<~

Todo Lo Bueno Llega A Su Fin

Kenny no sabe exactamente como llegó a aquella situación, sólo tenía claro que en algo punto entre su llegada y el saludo a su viejo amigo, había sido acorralado contra la pared con el chico en su cuello.

-Debí suponer que esto pasaría, tu ni siquiera tienes netflix.

Dogpoo se alejo un poco para mirarlo a los ojos con gesto divertido.

-Tengo la cuenta de Token, al igual que la mitad de los chicos en el pueblo -rodó los ojos el castaño- Lo que no es muy útil, ya que en caso de que lo olvides, soy más pobre que tú y el Internet del vecino es una mierda.

-Amigo, tu barrio es una mierda, probablemente tu vecino también se lo esté robando a alguien más -Kenny suspiró antes de alejar al chico y arrojarse a la cama a mirar el techo de lámina.- Me asaltaron dos veces de camino, y a uno de los ladrones le robaron lo que me robó un ladrón de ladrones.

-Já, trabalenguas version poblacional.

-Ríete todo lo que quieras, pero esos malditos se robaron hasta mis calzones.

-¿No deberías estar quejandote por que quitaron tu celular o algo?

-¿A quien le importa esa basura fabricada por enanos esclavos de Memo Aponte en Vietnam? ¡A mi me importan mis calzones del rayo McQueen!

-Con razón siempre acabas tan rápido...

-A mi no me andes calumniando, tu y tu culo olor a obo nunca han tenido problema con mi rendimiento.

Dogpoo se encogió de hombros antes de sentarse junto a él en la tabla a la que llama colchón, ahora a una distancia más prudente.

-Me sorprende que me llamaras, normalmente cuando me llamas después de las 11...

-Chupalo entonces -interrumpió Kenny aún mirando a techo.

-Es porque quieres, eh, como decirlo de forma educada, chocar espadas, acariciar la coneja, hacer el muele carne, el frutifantas-

-Sí, sí, ya entendí -Kenny suspiró antes de mirar al rostro del muchacho, cuyo gesto era más de curiosidad que de reclamo por calentarle el boiler, como dicen por ahí.- Y a eso vine, lo juro, pero...

-No vienes desde hace meses, todo desde que te volviste cercano con ese niño Bu-

-¡No se habla de Butters!

Dogpoo bufó, algo molesto. Incluso su ex con el que terminó en mejores términos no le aguantaba sino era para el cuchi cuchi.

-Esta bien, la cosa es que pensé que nunca volvería a tenerte de esta forma.

El castaño fijo su mirada en él antes de sonreírle tentativamente, con cuidado empezó a gatear en su dirección hasta quedar frente a frente. Lentamente acercó sus manos a el cierre de los pantalones de Kenny, dándole tiempo para detenerlo si así lo quisiese el rubio.

Lo más fácil para el Mccormick sería dejar todo fluir, no sería la primera ni última vez que ignoraria sus sentimientos para enfocarse en lo carnal. Cerró los ojos y trató de apagar su mente por el momento.

Un par de ojos azules, uno brillante y otro con una cicatriz, aparecieron para juzgarlo.

-Agh, malditas emociones de la chingada que no dejan chingar tranquilo, chingada madre de... -gritó Kenny con marcado acento de mexicano pelo en pecho, agarrando las manos del chico antes de que cumplieran su cometido.

El castaño sólo suspiró.

-Tan mal te dejó el chico Stotch, ¿eh?

-Lo siento...