— ¿Qué pasa, Mía? —se acerca a mi cuerpo. Trago saliva.
—Aléjate —espeto. Me mira con una sonrisa ladeada. Dennis parece que lo está matando con la mirada. Gian me mira por un segundo y luego suelta una risa.
— ¿Y tu quien eres? —Mira a Dennis—. ¿Quién es?
Parece pensarlo, —Es mi... novio.
No sé quien parece más sorprendido, si él o yo.
Primero que todo, ¿Dennis sabe algo sobre él? ¿Sabe que tuvimos alguna relación? Bueno, creo que sabe que es mi ex, por mi gran y estúpido comportamiento. Estoy cien por ciento segura que ya lo he superado, ni siquiera siento algo por él. Es más, el fue mi primer novio, el primer novio que me engaño. Solo duramos cinco meses juntos y luego me entere que se acostaba con Hillary porque yo no quería acostarme con él. No estaba lista.
Pensé que duraríamos para siempre, lo típico, pero él no supo esperarme.
Ni siquiera sé que hace aquí.
Gian alza sus cejas y se acerca a mi cuerpo original. Dennis se aparta. El ríe por su acto.
— ¿Crees que te ama de verdad?
—Lárgate —le interrumpe.
El sigue con su cara de arrogante. Entorno mis ojos.
Se encoje de hombros—. Está bien, disfruten —y se va.
Lo último que es escucho es la puerta de la habitación cerrarse.
Dennis se arre cuesta en la pared— ¿Cuál es su nombre? —inquiere.
Le miro—. Gian.
— ¿Es tu ex, cierto?
—Sí.
— ¿Te incomodo con estas preguntas?
—No, para nada —sigo mirando mis pies—. El me engaño con Hillary —suelto y el parece prestarme atención—. La misma Hillary me lo dijo antes de que él se fuera de nuevo a Francia. Solo duramos cinco meses juntos. ¿Sabes? Lo mejor de todo esto es que nunca llegue a enamorarme de él —lo miro con una sonrisa ladeada. El frunce el ceño.
— ¿Por qué te engaño?
—Por qué... yo no estaba lista para eso —digo esperando a que me entienda. Se relaja y asiente.
—Ok, lo entiendo.
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Intercambio de cuerpos.
Teen Fiction¿Que pasaría si de un día al otro éstas en un cuerpo que no es completamente el tuyo? ¿Que pasaría si tienes que dar todo para poder volver a la normalidad? Pues, eso le paso a Mia y a Dennis. Sus vidas son una porquería, como ellos lo dicen. Ellos...