Ascensor

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-¿qué?.... ¿A-aroma? 

Pov Yoongi 

No, estoy seguro que oí mal, ¿verdad? 

Esto es imposible, no puedo oler como un alfa, yo perdí todas las esperanzas de serlo. 

-¿puedes olerme? - pregunté sin salir de mi trance, pero no podía ver nada. 

-no te creas importante. - sonaba entre molesto y avergonzado. 

-pero puedes olerme ¡Tú puedes olerme! 

-¿tanta emoción porque puedo olerte? Ja, Yoongi aunque sea posible que nos pertenezcamos el uno al otro ya nadie cree en eso de la pareja predestinada. Es algo que ya no tiene sentido. ¡Además eres un omega! 

-¡no es eso tonto! - dios, este chico es testarudo cuando entra en confianza o tal vez solo son efectos del celo. - ¡si fuera un omega no olería como un alfa! 

Por el silencio prolongado, pareció que lo estaba pensando un poco. 

-Jimin, eres la primera persona que me reconoce como alfa. 

-imposible, tu olor es perceptible, no puedo ser el único que detecte que eres alfa. 

-hace un momento dijiste que era omega. 

-¡digo tonterías cuando me pongo nervioso! ¿Bien? 

-Jimin esto es increíble ¡todos decían que yo era un beta! ¡Incluso algunos dijeron que soy un omega! Tú eres mi salvación Jimin. - en ese instante, la luz regresó, pero el ascensor no se movía. Cuando volteo mi rostro me doy cuenta de que estábamos muy cerca. 

-no puede ser que ni siquiera tú sepas que eres un alfa. 

Suspiré, tenía razón. 

-sí, soy un idiota por no saberlo, pero ¿sabés? Mis padres ansiaban tanto una hija. - creo que tendré que ser sincero con él para que me ayude. - pero nací siendo niño, así que usaron su último recurso, criarme como beta u omega. 

Él escuchaba atento. 

-es por eso que nunca supe lo que era, me quitaron parte de mi identidad. Por eso estoy tan feliz de que me reconozcas. - sonreí colocando una mano en mi pecho. - el aroma a menta y miel es propio de los alfas posesivos y es raro, yo nunca fui posesivo con nada. 

-no se refiere a ese tipo de posesivos. 

-¿eh? No te escuché. 

Jimin me miró y negó con las manos. 

-no, nada. 

-Jimin ¿podría pedirte un favor? 

Me miró aterrado y se apegó a la pared. 

-¡no me voy a reproducir contigo, enfermo! 

Cuantas ocurrencias en una pequeña cabecilla... 

-no, eso no. - le resté importancia con mi movimiento de mano. - necesito que le digas a mis padres que soy un alfa. 

Pareció pensarlo un poco. 

-no es eso... ¿Algo exagerado? 

-si alguien más aparte de mi no se lo confirma no me creerán, por favor Jimin. 

Él suspiró. 

-¿qué obtengo a cambio? 

-¿qué? 

-si voy y le digo a tus padres que puedo olerte, creerán la tontería de que las parejas predestinadas existen y querrán que este contigo. 

-te prometo, que no te presionarán a nada, solo necesito que tú mismo lo confirmes, por favor. 

Lo miré a los ojos y busqué señales de duda. 

-esta bien. - respondió luego de suspirar. - pero sácame de aquí, sigo en celo. 

-ese es otro problema. - respondí mirando la puerta. - el ascensor está atascado, y no traigo mi teléfono ¿y tú? 

Él negó. 

-de acuerdo, solo queda esperar a que nos encuentren. - me senté en el suelo y acomodé las mangas de mi bata. 

-¿qué hace? - ¿ahora comenzó a hablarme formal? Este omega es un caso perdido. 

-esperar. 

Él suspiró y se sentó a mi lado. 

-bien. No tenemos de otra. 

Sabía bien que luego de un apagón, podríamos quedar atrapados por horas, pero no quería preocuparle. Tiene suficiente con ser un omega en celo encerrado junto con un alfa. 

Alfa... Me siento aliviado ahora. 

Por cierto, Jimin cubrió bien su celo con los supresores, al punto de que no puedo sentir siquiera su aroma característico de los omegas. 

-¿deberíamos hablar para que el tiempo pase más rápido? - preguntó jugando con sus dedos. Acabó de notar que es muy hablador.

-bien, empieza tú. 

-Emm...¿Por qué nadie te creyó sobre que eres un alfa?

-bueno. - lo medité por un momento. - mi abuela le metió esa idea en la cabeza a mis padres y... Me afectó tanto. En la primaria me confundían con una niña. - reí ligeramente y él sonrió. - seguí creciendo y nunca nadie pudo saber que es lo que yo era. Aún cuando me presenté, ni siquiera yo pude saber que era. Ahora yo. 

-adelante. 

-en los 15 minutos que llevamos aquí mencionaste más de una vez que no crees en eso de las parejas predestinadas, ¿por qué? 

-bueno... Una vez, cuando estaba en la secundaria. Yo creí que un chico era mi pareja predestinada. Luego de tanto pensar, un día decidí contárselo y... Fue tan humillante. Me llamaron omega defectuoso. Debido a que si solo uno puede oler al otro pero no es mutuo eso quiere decir que hay algo mal. Y todos eligieron decir que yo era el que estaba mal. 

Lo miré atentamente en todo momento. 

-¿y por esa razón decidiste dejar de creer en eso? 

Asintió. 

No sabía que decir. A decir verdad nunca Le puse mucha atención a ese tema. Yo solo quería tener a un omega al que amar, cuando era joven pensaba eso. Aún si yo mismo fuera uno y ese tal romance con el que soñaba fuera imposible. 

Nos mantuvimos en silencio por tal vez media hora, por favor que diga algo, este silencio es peor que cuando voy a reuniones familiares y todos se miran como fieras hambrientas tratando de saber quién se quedará con la fortuna del bisabuelo Min cuando este muera. Aunque dudo que lo haga pronto, lleva 113 años y pareciese que ese hombre tiene mucho por recorrer aún. 

-agh. - repentinamente soltó un quejido y tocó su estómago. 

-¿estás bien? 

-tú olor... Los supresores están perdiendo efecto. - suspiró con dolor. 

Por favor que alguien venga y nos saque de aquí ¡ahora! 

Mi lobo comenzaba a reaccionar ¿alguna vez me habré podido comunicar con él? Joder no lo recuerdo. Nunca sentí a mi lobo en toda mi vida. ¿Por qué reacciona cuando este chico está en celo? 

La vida debe odiarme. 

-ngh... Ah — - la piel se me erizó. Él cubrió su boca con ambas manos rápidamente. No puede ser ¡el aire de ha vuelto pesado! 

Aparte la mirada algo avergonzado, ¿qué se supone que haga? 

-Yoongi. - llamó y voltee a verlo, tenía los ojos casi con lágrimas y las mejillas sonrojadas, sin olvidar su respiración algo acelerada. - puedo... ¿Pedirte un favor? 

Espero que se olviden de nuestra existencia por lo que resta del día, no necesitamos que nos saquen de aquí ahora, se los agradezco. 

¡No quiero un alfa! » YOONMIN OMEGAVERSE «Donde viven las historias. Descúbrelo ahora