54. Lineas rosas.

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30 Diciembre 2016.

EMMA.

-Es muy sencillo, Emms.-me alienta Noah.

-Se una mujer, maldita sea. Entra ya y orina en ese cacharro.

Esas son las palabras de Nina mientras Alexa me empuja metiéndome en el baño y cierra la puerta dejándome sola.

Apoyo mis manos sobre el lavabo y miro mi reflejo en el espejo. ¿Qué pasará si el predictor da positivo? ¿Que haré si estoy embarazada? Un hijo no es ningún juguete y la sola idea de tenerlo que criar sin ayuda me aterra por completo.

Acaricio mi vientre de lado imaginando como se vería en mi una barriga gigante. Se que sonará absurdo pero en otras circunstancias me encantaría estar embarazada. ¿Qué dirá Axel de todo esto? Se le ve muy feliz con Deborah, aunque debo admitir, que sus palabras la noche de Navidad me dejaron algo aturdida.

-¡He visto ancianas mear más rápido!

El grito de Alexa me trae de vuelta a la realidad.

-¡Eso es por qué la mayoría tienen incontinencia urinaria!-respondo.

Me siento en el baño y dos segundos después, está todo listo. Abro la puerta y salgo. Rápidamente le entrego el predictor a Alexa y me tiro sobre mi cama gimiendo lastimosamente contra un cojín.

-Santa mierda, cógelo Noah.

Alexa lanza el objeto hacia la gemela, la cual, lo coge y lo mira espantada.

-¡Yo no quiero ser la primera!¡Cógelo Alexa!-se lo devuelve.

-¡Pero no estoy preparada para ser tía!-protesta.

-¡Ni yo tampoco!

-¡Ya callaos y dadme el jodido cacharro antes de que os asesine!

Tras la amenaza de Nina, Alexa se lo entrega y se sienta a mi lado sobre la cama. Estoy mas nerviosa que el día en el que inicié el baile de graduación junto a mi padre. O más que el dia en el que regresé tras fugarme de mi boda. Abrazo a Alexa mientras Nina observa el predictor antentamente y Noah muerde sus uñas como una histérica.

-Solo han pasado diez minutos, Nina.-informo.

-Dos lineas embarazo, una linea no embarazo.-añade Noah.

-Me voy a morir de los nervios.

Comenta Alexa mientras hace hueco a Nina y la cuatro nos tumbamos boca arriba en la cama. Parecemos cuatro niñas en una pijamas. Con la pequeña diferencia de que puede que seamos cinco y de que somos bastante adultas.

-Quiero que Axel vuelva.

-Emmet me besó.

-Ryder me pidió matrimonio.

-Oliver me dijo que me quiere.

Un gran silencio se crea en la habitación tras los cuatro comentarios que acabamos de realizar. No puede ser que las tres chicas que tengo a mi lado estén jodidamente felices y enamoradas y yo esté a punto de saber si voy a ser madre del chico del que estoy enamorada pero del mismo que me engañó y usó a su antojo durante meses. Asique hago lo que siento en ese momento y si, empiezo a llorar.

-¿Emma, que ocurre?

-Os odio. Jodidas perras insensibles-lloro desconsoladamente-. Me alegran vuestras noticias pero os quiero matar.

-Vale, creo que mini Axel está causando esto.-rie Nina.

-Una de mis mejores amigas es mi cuñada y otra de ellas se va a casar. ¡Y yo aquí a punto de morirme!

Llévame contigo [CORRIGIENDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora