La hija de Aizawa. (Todoroki y Tu)

Capítulo 40.- Convivencia.

Abro los ojos lentamente, mi cuarto aun esta oscuro, volteo a ver el reloj y son las cinco de la mañana, pesadamente me pongo de pie y camino hacia el baño para tomar una ducha.

Salgo, busco mi uniforme y me lo pongo, observo el reloj, solo han pasado cuarenta minutos y aun me siento un poco cansada, entonces la puerta se abre y de ella entra mamá, me observa un poco sorprendida.

—¿Qué haces despierta ______?

—Me levante temprano, así que me cambie de una vez —ella se acerca a mí y pone su mano en mi frente.

—No, hoy no iras, aun tienes fiebre —retira su mano, pongo mi mano para verificar sus palabras, es cierto tengo fiebre, de pronto una serie de imágenes pasan por mi cabeza.

Son de Todoroki, él ha venido a verme, de repente, una frase llega a mi mente "Me estas diciendo que no soy ardiente" No, no, no.... ¿Cómo puedo ser capaz de decirle eso? Siento mi cara arder.

—Ves, ya te esta dando más fiebre, cámbiate y acuéstate —asiento avergonzada, me cambio a la misma ropa que traía antes, tomo la blusa y me le quedo observando. ¿Porque traigo esta blusa? Recuerdo que ayer en la mañana la traía puesta. Dejo eso de lado y me la pongo, poco después recuerdo que Todoroki me ha traído esta blusa cuando yo quería quitarme el pijama. ¡Oh por All Might! Dime que es un sueño. Empiezo a recordar todo y mientras lo hago mi color y la temperatura de mi cara aumentan.

—No, no, no, no —camino alrededor de mi cuarto—. ¿Cómo pude pedirle un beso ¿¡Un beso!? Y lo peor, tuve que decirle que estoy enamorada de él —me siento en la cama y suelto un grito de frustración, escucho unos pasos y la puerta se abre, dejando a la vista a mi papá, aun mas desaliñado que de costumbre.

—¿Que paso? ¿Te sigues sintiendo mal? —me pregunta somnoliento.

—No, estoy bien, tranquilo —se da media vuelta y se dispone a salir—. Papá —se voltea a verme.

—Te sientes mal, ven, te llevare con el doctor —niego.

—Estoy bien pero ¿Como saben que estoy enferma? —parpadeo confundida—. Mamá vino más temprano y me dijo que no iré a la academia, pero no recuerdo haberlos visto ayer o avisarle que estoy enferma —se acerca a mí y me da un pequeño coscorrón.

—Niña tonta, debes avisar cuando te sientes mal —me sobo la cabeza—, al menos le avisaste a Todoroki, el estuvo aquí Cuidándote hasta que llegue y mira que llegue tarde —me sorprendo ante sus palabras, no imagine que Todoroki se hubiera quedado a esperar a que uno de ellos llegara—. Si estás bien entonces iré a cambiarme, Naomi se quedara a cuidarte —se pone de pie y comienza a caminar a la puerta.

—Que te vaya bien papá —voltea a verme.

—Descansa —sale del cuarto y yo me dispongo a seguir durmiendo.
.
.
.
Escucho que me llaman y perezosamente voy abriendo los ojos, visualizo a mamá enfrente de mí.

—Te traigo el almuerzo —me siento en la cama.

—Gracias mamá —empiezo a comer, mientras estoy comiendo mamá prende el Play3 y abre la aplicación de Netflix para poner "Arrow" Una serie que le ha encantado, y que en un día y medio ha terminado la primera temporada.

Termino de comer, me pongo de pie, tomo mis trastes y me dispongo a llevarlos al lavabo.

—Deja eso, yo lo llevaré —me dice sin apartar la mirada de la televisión.

—Iré a dejarlos y lavarlos, tranquila no moriré por hacerlo.

—Yo los lavo después —ignorándola y sabiendo que no se apartara de la televisión por nada del mundo, bajo y lavo mis trastes pues mamá ya ha lavado los que utilizo para hacer la comida, subo y ella ya ha terminado el capítulo—. Te dije que yo los lavaría —me acerco al mueble donde se encuentran mis pastillas y me las tomo.