Océano de Solaris

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Océano torbellino,
de mareas que dan vueltas por el tiempo,
renovando las posibilidades de la vida terrenal.
Arrastrando hacia la orilla el más primitivo miedo.

Fuente de milagros, ángel celestial.
Tú que escuchas las plegarias,
los gritos que se encierran en las celdas oscuras de la mente
y el deseo profundo de un corazón doliente.
Misioneros peregrinan desde las recónditas galaxias,
desde todos los continentes.
A depositar la esperanza naciente,
de que revivas la muerte.

Extendiendo nuestra alma y cuerpo hasta el infinito.
Un mar que espejea la consciencia inconsciente del ser humano.
Revelando en sus oleajes pistas de grandes misterios.
La vida, el amor, la felicidad y la muerte,
se pierden en tus profundidades.
Se disuelven en aguas misericordiosas,
resucitadoras de almas dichosas.

En este mar me baño al atardecer.
Entregando mi destino al anochecer.
Me reproduzco en esta puesta de sol gemela.
Dos estrellas, un planeta.
Mil recuerdos en nuevas vidas,
todas ellas eternas.

*La imagen en multimedia corresponde al océano de Solaris, referido en la novela hómonima escrita por Stanislaw Lem.

Diario de mis viajes infinitosWhere stories live. Discover now