Capitulo 5

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Capitulo 5

"Esto... esto es peligroso..."

-Hola buenos días- saludaba un joven que pasaba al verme por lo que yo solo sonreí y asentí para devolverle el saludo

Al igual que muchas personas del lugar el era uno de los muchos que venia a el templo en la mañana para orar por un buen dia, esto claro lo hacían un sinfín de personas y mas ahora que estaban de vacaciones por lo que no era raro para mi, al fin y al cabo yo siempre paso el tiempo aquí.

El dia estaba a su máximo esplendor siempre siendo brillante como si el sol amara esta zona de el mundo, respladeciendo en su totalidad, me sentía alegre de estar en este lugar, desde que era niña me daba tranquilidad los templos y por alguna razon este no era una excepción si no que al contrario era una parte especial, pues me habia encariñado de este mucho mas que cualquiera

Mi nombre es Nozomi Tojo, si bien antes era una chica, resulta que ahora por razones al azar del destino, dioses o cualquier cosa que pudiera hacer esto, era un hombre, de ser una mujer de 18 años pase a ser un joven peli morado de altura promedio.

-Tojo- una voz resonó a mis espaldas mientras me volteaba de golpe para ver a una anciana de muy elevada edad, esta con un baston y apenas midiendo poco menos del metro y medio, la mujer que se encargaba de cuidar el templo era ella, le llamaba señora Sori por el apellido de su familia, esta mujer era la misma representación de un angel, la conozco desde que tengo aproximadamente 15 años y desde entonces esta mujer a sido lo mas cercano que tengo a una abuela

-Si, que pasa señora Sori?- pregunte con una sonrisa servicial

-N-Necesito que limpies por donde están los visitantes, se esta acumulando demasiado polvo- comento mientras señalaba el lugar donde estaban todas las personas que aunque no eran muchas se diferenciaban fácilmente

-Enseguida lo hago- sonreí divertida, el vestuario que usaba en estos momentos era divertido , pues era el mismo que usaba cuando era mujer solo que este en una talla mas grande, normalmente los vestuarios de hombres suelen variar un poco de estos, pero como en este templo solo venían mujeres como voluntarias no me quedo de otra que usar uno de estos, pero como dije no se me veia mal, no parecia de hombre o mujer si no que parecia un atuendo cualquiera lo cual me daba un poco mas de seguridad

-Sabes Tojo?- la anciana me hablo antes de que partiera –Me recuerdas mucho a cierta chica, su nombre es Nozomi, es una chica linda, dedicada y sobre todo hermosa, con un pelo y ojos muy similares a los tuyos-

Ante eso solo sonreí divertida –Tal vez seamos hermanos separados al nacer?- bromee –Pero no lo creo señora, mi nombre es Tojo y no por que sea igual que el apellido de esa chica significa que la conozco-

-Ya veo... es una lastima, se llevarían demasiado bien ustedes dos, aunque creo que con uno al dia me basta con sus chistes, extraño a la chica, pero que bien que fue a pasar tiempo con sus padres a otra ciudad, le hacia falta unas vacaciones de su vida rutinaria-

-No tiene ni la mas minima idea- susurre por lo bajo para luego hacer una leve reverencia y entonces irme directamente a donde estaban los visitantes del templo, apenas llegue me encargue de limpiar polvo, de retirar la basura del lugar entre otras de mis tareas

Siempre e estado sola, siempre soltaria sin nadie a mi lado, viajaba por el mundo como una niña siempre cambiando de escuela o de ciudad, constantemente intentaba hacer amigos, sin embargo jamas fui capaz de hacerlo, paso mas tiempo hasta que llegue Akibahara esta ciudad en su principio parecia una mas del monton, pero teniendo 15 años apenas encontre este templo yo me llegue a enamorar por completo de este lugar, decidi quedarme a hacer mi vida aquí pues sentía que era lo correcto, gracias a mi decisión mis padres me dejaron en esta ciudad con la condición de que me cuidara siempre, aprendi a vivir sola e incluso a muchas mas cosas, la vida era buena, tenia una ciudad, una escuela donde tenia la esperanza de hacer recuerdos que permanecieran por siempre, pero lo único que me faltaba era una amiga.

Un Deseo Mal InterpretadoWhere stories live. Discover now