Capitulo 11

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Capitulo 11

"Tengo que hacer algo y la razón eres tu."

El sol decidió por su propia cuenta que hoy se ocultaría de nuestra vista. Siempre se mantenía sobre nosotras en todo momento mientras cantábamos y bailábamos avanzando con rumbo a un mañana pero ahora parecíamos no ser dignas de que nos abrazara con su calidez. Un viento frio erizaba mi piel en su lugar, aun con la ropa sobre mi cuerpo, este lograba hacer que un escalofrió recorriera mi cuerpo.

Ese mismo viento que me envolvía simplemente recorría el suelo levantando pequeñas porciones de polvo, haciendo que el trabajo que realizaba se viera completamente inútil. Mantuve mis manos firmes en la escoba mirando la libertad con las que se levantaban las hojas a causa del viento. Tan hermoso, tan feliz. Era tan inquietante pensar que nada pudiera perturbar su paz.

Entonces caí en la cuenta que la verdad del porque me sentía así estaba en la misma razón de la cual me lamentaba desde hacía semanas. Desde el momento en que Anju me lo confeso, mi ser se quebró y me sentía tan tonta. No haberme dado cuenta me lastimaba, más el mismo hecho de saber que si aquella chica no me lo hubiera dicho… Jamás lo sabría hasta que fuera tarde.

—Nozomi.— Una voz me llamo desde lo lejos mientras veía a una mujer mayor la cual hacia un gesto para que me acercara, lo cual hice. —Necesito que limpies por dentro del templo, la gente comenzara a llegar en poco.—

La señorita Sori era de las pocas personas que sabían que este chico en realidad antes era una mujer. Aun siendo así, ella no se interesaba en hablar del tema, simplemente me trataba como la chica con la que trabajaba desde hacia años. La razón mas aparente por la que no quería hablar de ello sospechaba que como ella tampoco sabia mucho de la leyenda de la que nos hablo por lo que no quería que alguna mala charla pudiera tener un efecto negativo. Dudaba que eso pasara pero tampoco tenia ánimos para hablar del tema ni siquiera con mis propias amigas.

Durante el resto del día todo se resumió en lo mismo que consistieron mis semanas anteriores al día. Limpiar el templo, atender a los invitados los cuales iban en aumento conforme pasaban los días y todo por la razón que mientras mas avanzaban las vacaciones en las cuales se acercaban las fechas navideñas.

Semanas pasaban como si fueran días. No recordaba cuantas veces intente encontrar a Elicchi después de eso. Ni siquiera siendo Nozomi respondía mis mensajes e insistencias. Lo poco que sabia de parte de Arisa —Gracias a que Yukiho informo a Honoka— Era que ambas partirían a Rusia un tiempo con sus padres para pasar el festejo en familia. No era algo que me extrañara pues años pasados esta era la rutina que seguían. Sin embargo el hecho de que ignorara mi presencia por completo era algo nuevo de esa rutina.

El hecho de que esto pasara era mas que probable que fuera por lo que Maki nos conto de Muse, las chicas se habían peleado desde hace varias semanas, por lo menos las restantes que no sufrieron el cambio. No entramos mucho en detalles pero a grandes rasgos todo se resumía en nuestra culpa. Las chicas extrañadas del que partiéramos cinco de nosotras sin previo aviso empezaron a cuestionarse la verdadera naturaleza de aquella decisión. Al principio se sujetaron a la idea de que nosotras queríamos hacer una sub unidad para Muse. Al paso de los días y nuestra ausencia empezaron las discusiones respecto a el que nos fuéramos, todas se empezaron a culpar mutuamente de que alguna hiciera algo que molestara a las demás, al principio fue tranquilo y luego de la nada todas se culpaban sin parar. Era duro claramente.

Sin embargo a la vez era divertido ya que todas convivían mutuamente con las chicas que creían las habían abandonado, ninguna perdió el tiempo después de la partida de Umi Sonoda, todas querían una oportunidad, después de ver el desprecio que nos tenia desde el fondo de su alma, cada una llego a una propia conclusión, tal vez cada una diferente, pero cada una llevaban a lo mismo… Adueñarse del corazón de su amada.

Un Deseo Mal InterpretadoWhere stories live. Discover now